Llora Pau Gasol al ver su camiseta junto a la de Kobe Bryant, su cabeza estirada observando el ‘16’ colgando en el techo del Crypto.com Arena de Los Angeles Lakers al lado del ‘24’ de su añorado y querido hermano. Su cara transmite tanta fascinación como incredulidad, él incluso cabecea como diciendo: “No, no me lo creo todavía”. El coliseo angelino acaba de rendirse a sus pies por sus logros dentro y fuera de la pista durante el descanso de la victoria local contra los Memphis Grizzlies, la franquicia con la que aterrizó en Estados Unidos. En L.A. estaban todas las figuras importantes en su vida personal y deportiva. Los máximos responsables del equipo, notables excompañeros, un sinfín de amigos y la familia al completo, presentes para vivir el momento culmen de su trayectoria.
La leyenda del baloncesto ya es el primer deportista español en recibir el máximo honor que puede recibir un atleta de las grandes ligas en Estados Unidos, el séptimo europeo y el duodécimo Laker en conseguirlo en la NBA, donde un total de 206 jugadores han obtenido la singular distinción de la retirada de la camiseta con su dorsal. Nadie más vestirá el ’16’ en un equipo icónico como los Lakers, un número que será eternamente sinónimo de la figura de Pau.
El exjugador de 42 años (Barcelona, 6 de julio de 1980), vivió los momentos previos al homenaje sentado junto a su hija Elisabet Gianna en la primera fila del pabellón que le vio brillar entre 2008 y 2014, cuando cosechó sus dos anillos de la NBA y entró a formar parte de la historia de la franquicia más laureada y mediática de la competición. En los tiempos muertos durante la primera mitad del partido, varios excompañeros alababan su figura en el video marcador, donde también se mostró un resumen de sus mejores momentos como Laker. No faltó a la cita la afición, vestida con su camiseta púrpura y oro y el ’16’, cortesía de la organización de la velada. El exjugador catalán recibió un par de ovaciones sin poder contener sus sentida emoción. Su impacto en el equipo fue tal que anoche le llegó un homenaje sin parangón, un tributo que a él todavía le cuesta procesar en medio de un alud de calor humano.
Durante su discurso, después de dejar correr las lágrimas de emoción al ver su ‘16’ por las nubes, junto a titanes como Jerry West, Wilt Chamberlain, Kareem Abdul-Jabbar, Magic Johnson y Kobe Bryant, no se saltó ningún agradecimiento y tuvo palabras de corazón para los suyos y todos quienes le ayudaron en el camino.
“Muchas gracias, qué sentimiento tan increíble, qué tremendo honor recibir este homenaje”, arrancó Pau, todavía limpiándose las lágrimas. “Te quiero hermana, estoy orgulloso de ser tu hermano y el tío de tus hijas”, comentaba al agradecer la presentación de Vanessa Bryant, la viuda de Kobe, que dio paso a un célebre vídeo del mito fallecido explicando por qué la figura de Pau era tan importante para la historia de los Lakers. “Sin él no tendríamos esos dos anillos”, recordaba durante la ceremonia de los Oscars de 2018 el astro a pregunta de Antonio Martín Guirado, por entonces corresponsal de la agencia EFE en L.A.
“Estoy sin palabras, ver todas estas caras aquí, a todo el mundo en casa. Solo puedo dar las gracias, me habéis hecho sentir muy especial y ha sido un honor vestir esta camiseta, jugar para esta franquicia. No puedo proseguir sin recordar a la cara y la persona que no veo hoy aquí, al hermano que me trajo hasta aquí”, prosiguió. La referencia provocó los cánticos dedicados a Kobe en las gradas. “Le echo muchísimo de menos y sé que esperaba este momento. Le quiero y me hubiera encantado que pudiera haber estado aquí junto a Gigi”, añadió de nuevo con la emoción de nuevo a flor de piel.
Pau, mito absoluto que transciende a los Lakers, la NBA y el baloncesto en general, volvió a fijarse en aquel chaval que empezó a botar el balón en el Col·legi Llor, en Sant Boi del Llobregat. “Como niño en España, tenía un sueño. Quería convertirme en jugador de baloncesto y jugar en la NBA, pero jamás imaginé, ni en un millón de años, que un día así podría llegar. Es un honor enorme estar entre estos grandes individuos de esta gran franquicia”, confesó.
La retirada de dorsal es una pincelada más, otro logro histórico y pionero, de Gasol, el tipo que rompió todas las barreras conocidas para el baloncesto español. Con miembros destacados de La Familia de la selección presentes, desde Juan Carlos Navarro hasta Juancho Hernangómez, pasando por José Calderón, Felipe Reyes y Raül López, el elenco de estrellas presentes para la gran ceremonia incluyó a colosos como Abdul-Jabbar, James Worthy, Magic y exjugadores y jugadores de calado como Derek Fisher y Jimmy Butler, excompañero suyo durante su etapa en los Chicago Bulls que apareció por sorpresa en el pabellón.
El palmarés de leyenda del ’16’
– 2 anillos NBA
– 6 veces All-Star
– Rookie del año
– 2 veces en el 2º mejor quinteto
– 2 veces en el 3er mejor quinteto
– Mejor quinteto de Rookies
– 2º máximo anotador europeo NBA: 20.894 puntos
– 2 platas olímpicas y 1 bronce
– Campeón del Mundo
– MVP del Mundial
– 3 oros Europeos
– 2 MVP del Eurobasket
– 3 Ligas ACB
– MVP Final ACB
– 1 Copa del Rey
– MVP Copa del Rey
- Dorsal ’16’ retirado con Lakers
- Gran Cruz de la Real Orden del Mérito Deportivo
- Creu de Sant Jordi
Si bien fueron apenas 10 minutos de homenaje al descanso, la intensidad estuvo a la altura del acontecimiento en L.A. Antes, el vídeo con sus mejores jugadas levantó la pasión de esos años con tres Finales de la NBA y dos títulos entre público presente. Fue una época dorada, con él en el centro de la consagración de un equipo legendario y sobrepasando todas las barreras consabidas del deporte español. Sus batallas con Dwight Howard y Kevin Garnett, Tim Duncan y Dirk Nowitzki, de nuevo clavadas en la retina del espectador, un precioso viaje a los recuerdos que le dejó al borde del estallido afectivo minutos antes de echarse a hablar.
Después de agradecer el apoyo de todos y no dejarse a ningún miembro de su familia personal y deportiva durante el discurso, suficientemente recompuesto para firmar con elegancia sus históricas y seguidas palabras, Pau decidió cerrar con un mensaje de compromiso.
“Voy a terminar con una cosa: de aquellos que se les ha dado mucho, mucho se espera de ellos. Seguiré comprometido en impactar a otras personas, en marcar la diferencia, en inspirar a los demás, en ayudar y convertir este mundo en un lugar mejor, más sano. Os quiero a todos, ¡muchas gracias!”, cerró el ’16’ en su gran noche, redonda y ejemplar como su trayectoria personal y profesional.
Ya eterno en L.A., mito entre mitos de los Lakers, sus palabras recuerdan el verdadero valor de su figura, su acrecentada estatura alejado de las canchas y del mundo del deporte, algo extraordinario para destacar en un campeón de su talla.