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El aparato que todos tenemos en casa que puede dejarte sin un duro: revísalo porque es muy peligroso

¿Sabes que hay un aparato muy común en los hogares mediante el cual los ciberdelincuentes pueden vaciar la cuenta bancaria en cuestión de minutos? Se trata del router, el dispositivo que ofrece una conexión WIFI para navegar por Internet. La gran mayoría de nosotros simplemente lo conectamos y realizamos una configuración básica para empezar a utilizarlo.

Sin embargo, un análisis realizado por la compañía de ciberseguridad Kasperky, halló más de 500 vulnerabilidades en routers, de las cuales 87 eran críticas. Las amenazas afectan tanto a los hogares como a las empresas. No hay que olvidar que el router es el centro de toda la red, ya que todos los dispositivos acceden a Internet a través de él.

Por lo tanto, si los hackers consiguen colarse en la red a través del router infectado, las consecuencias pueden ser terribles. Más allá de robarte tus datos personales y bancarios, pueden cometer diferentes tipos de estafas cibernéticas y, como el aparato está en tu casa o negocio, la responsabilidad sería para ti.

Los principales peligros del router

A pesar de lo mucho que ha evolucionado la tecnología en los últimos años, este aparato continúa siendo uno de los dispositivos más inseguros principalmente por dos razones. Por un lado, no todos los fabricantes crean parches de seguridad. Y, por otro lado, los usuarios apenas prestan atención a su configuración.

Una vez hackeado el router, los ciberdelincuentes pueden:

¿Cómo protegerlo?

Algo muy importante, aunque normalmente se pasa por alto, es actualizar el firmware. Del mismo modo que actualizas el sistema operativo del móvil o del ordenador, tienes que hacer lo propio con el router para que esté más protegido. De lo contrario, pueden surgir vulnerabilidades que los ciberdelincuentes pueden aprovechar para colarse en la red.

Por supuesto, siempre hay que cambiar la configuración de fábrica. Modifica tanto el nombre de la red como la contraseña. Como resulta lógico, la contraseña debe ser fuerte y contener letras (mayúsculas y minúsculas), números y símbolos especiales. Recuerda que cuanto más larga sea, más difícil lo tendrán los hackers para averiguarla.


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