El canciller español se comprometió a restaurar las relaciones del bloque europeo con Estados Unidos en un momento de tensiones comerciales
El canciller español, Josep Borrell, recibió el visto bueno de los eurodiputados para convertirse en el próximo alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, cargo que ocupará a partir del 1 de noviembre.
El político español logró el apoyo de los coordinadores que representan a dos tercios de los parlamentarios de la Comisión de Exteriores del Parlamento Europeo (PE), tras someterse a la audiencia ante ellos el lunes.
Borrell se comprometió a convertir a la Unión Europea en un actor global, afirmó que una de sus prioridades sería “restaurar” las relaciones de la UE con Estados Unidos en un momento de tensiones comerciales así como elaborar una nueva estrategia política con Asia.
El español también se refirió a la tensión en el estrecho de Ormuz que enfrenta EU e Irán y al acuerdo nuclear con Teherán, cuya continuidad la UE seguirá defendiendo, reportó el diario El Mundo.
Cuestionado por la situación en Venezuela, se mostró a favor de las sanciones que la UE aplica a autoridades y que no afectan a la población civil.
Además, Borrel se mostró en contra de las fronteras, “son las cicatrices que la historia ha dejado grabadas en la piel de la tierra”, dijo.
“I do not like borders. Borders are scars left of the surface of the earth. We’re building a political community that is not based on who is stronger, but on political agreements and democracy. We, Europeans, must be proud of it”#EPhearings2019 pic.twitter.com/6sOIAaefJL
— Josep Borrell Fontelles (@JosepBorrellF) 7 de octubre de 2019
Borrel incluso anunció que reserva su primera visita oficial para Pristina, uno de los temas delicados de la audiencia del nominado para ocuparse de la diplomacia europea ya que España nunca ha reconocido la independencia de Kosovo.
Tanto Serbia como Kosovo aspiran a la adhesión a la UE, con Serbia como país candidato y Kosovo como candidato potencial.
El Estado de Kosovo todavía no es reconocido por Serbia, el país del que se independizó en 2008.
En 2013, tanto el gobierno de Serbia como el de Kosovo cedieron a iniciar diálogos con la mediación de la UE, pero hasta ahora se han logrado pocos resultados.
(Con información de NTX y El Mundo)