Cristian Güiza, hijo del futbolista Dani Güiza, ha asistido esta tarde a ‘Sálvame’ para hablar sobre la relación que mantiene con su padre. Ya llevamos unas semanas escuchando esta historia y esta tarde Cristian ha hablado más abiertamente de la relación.
Cristian reconocía que la relación con su padre “ha sido buena”. El joven contaba que hasta deteriorar la relación “ha sido un proceso bastante lento“. “Todo empezó en un verano antes de irme a Madrid. Vi que mi padre se distanciaba de mí“, empezaba el joven.
Cristian Güiza, en ‘Sálvame’
El hijo de Dani Güiza reconocía que su padre se había alejado de él y que “su mujer tenía más responsabilidades sobre mí, la decisión la tomaba ella siempre”. A pesar de haber reconocido que le cuidaba, también le señalaba como culpable de “influenciar” a su padre.
Cristian Güiza, en ‘Sálvame’
El joven reconocía que se fue con su padre a los 12 años porque “me ofrecía un estilo de vida económicamente superior al de mi madre“. Desde los 13 años hasta septiembre del año pasado estuvo con su padre, pero “todo empezó a estropearse cuando las decisiones sobre mí las tomaba su mujer“.
Cristian es muy duro con su padre: “Él no se ha enterado de nada de mi vida. Mi padre me tiene que hablar y tiene que prestarme atención“. Pero el joven seguía señalando a Rocío, mujer de su padre, como “la que le comía el coco”.
Cristian Güiza, en ‘Sálvame’
Tras su intervención en ‘Sálvame’, el joven le enviaba un mensaje de atención a su padre: “Solo quiero decirle que vuelva a ser como antes. He pasado muy buenos momentos con él. Quiero que seas tú el que me hables, que vuelva a ser como antes. Por favor papá, trátame como me has tratado siempre”.
En ese momento María Patiño y Adela se despedían del joven, pero antes María llamaba al futbolista para ver si quería hablar con su hijo. Pero la llamada no fue contestada. Cristian se marchaba del plató derrumbado entre lágrimas.
Cristian Güiza, en ‘Sálvame’
Pero diez segundos después, Dani Güiza llamaba a María. Dani no podía contener las lágrimas al hablar con su hijo: “Siempre te hemos querido, hemos tenido fallos, pero como todos los padres. Yo te digo que el camino que llevas no es que quiero que lleves”.
Un momento muy emocionante donde ni el padre ni el hijo podían hablar, ya que solo lloraban. Cristian en ese momento entonaba el mea culpa hacia su padre y la mujer de su padre: “Yo quiero pediros perdón“. María Patiño añadía muy acertada: “Ha sido una rabieta de un niño de 19 años”.