La foto que podrían dejar las elecciones del 14 de febrero en Cataluña en el Parlament es muy parecida a la actual, con una redistribución de los escaños entre las tres formaciones independentistas. El Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat ha hecho pública este viernes una encuesta en la que atribuye a Esquerra Republicana la victoria en los próximos comicios, con 35 o 36 diputados (ahora tiene 32), seguida de Junts per Catalunya, con 31 o 32, que perdería dos o tres de los actuales. La CUP, que ahora tiene cuatro escaños, podrían lograr entre seis y siete.
De esta manera las tres fuerzas secesionistas podrían superar ampliamente los 68 escaños en los en que se sitúa la mayoría absoluta de la Cámara, pero el independentismo no lograría el objetivo que persigue desde hace tiempo y que verbalizan sus líderes: superar el 50% de los votos en unas elecciones catalanas. La suma del porcentaje de voto que atribuye la encuesta al secesionismo se sitúa en el 48,7%, ligeramente superior al 47,5 de los comicios de 2017 que convocó Mariano Rajoy tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
La encuesta consolida la tendencia de otros sondeos anteriores, que prevén un desplome de Ciudadanos, que pasaría de los 36 escaños actuales a 16 o 17, así como un aumento del PSC, que podía alcanzar 24 o 25 diputados, frente a los 17 que tiene ahora. El CEO también pronostica la irrupción de Vox en el Parlament, con entre cuatro y seis diputados, así como un aumento del PP de los cuatro actuales hasta siete u ocho y el estancamiento de los comunes, que ahora tienen ocho escaños y podrían llegar a nueve en el mejor de los casos.
Esta es la primera encuesta que se realiza después de la inhabilitación de Quim Torra, con una muestra de 1.500 personas. Concretamente, el trabajo de campo se llevó a cabo entre el 29 de septiembre, al día siguiente de conocerse la sentencia contra el presidente de la Generalitat, y el 9 de octubre.
En caso de que se celebrasen elecciones generales, el CEO pronostica también que ERC revalidaría la victoria electoral de hace un año y lograría 14 o 15 escaños (13 en 2019), el PSC repetiría los 12, Junts podría aumentar uno, de ocho a nueve, y los comunes se mantendrían en los siete o perderían un diputado. Vox mantendrían los dos escaños que logró, la CUP perdería uno de los dos, al igual que Ciudadanos, y el PP pasaría de dos a tres.
En otro apartado los catalanes vuelven a suspender tanto la gestión del Gobierno español en los últimos meses, que logra una nota de 3,84 sobre 10, como la del Govern de la Generalitat, que obtiene un 3,88. El 71,1% de los encuestados se decantan por la república cuando son preguntados sobre la forma de gobierno y solo un 14,5% por la monarquía. A la hora de definir el sentimiento de pertenencia la opción mayoritaria de los ciudadanos es que se sienten tan españoles como catalánes (39,7%), seguido de los que se sienten más catalán que español (23,7%) y solo catalán (23,4%). El 4,7% se siente solo español y el 4,1%, más español que catalán.
Otra de las preguntas clásicas de la encuesta del CEO es la que interroga si quiere que Cataluña sea un estado independiente. El no sigue ganando al sí por 46,3% frente al 45,5%, pero los porcentajes son distintos a los del sondeo del mes de julio, en el que los contrarios a la secesión eran el 50,5% y los partidarios, el 42%. En lo que se refiere al futuro político de Cataluña, el 51,9% apuestan por un referéndum pactado con el Estado, el 26,7% defienden que continúe siendo una comunidad autónoma y solo el 15,4% apuestan por que se repita una declaración unilateral de independencia como la de octubre de 2017.
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