Se cumplen poco más de dos semanas desde que la crónica social de nuestro país de hiciera eco de la ruptura de Rosalía y Rauw Alejandro tras más de tres años de relación y después de anunciar su compromiso, el pasado mes de marzo, con Beso, la que fue su primera colaboración juntos como cantantes de éxito. Desde entonces son muchos quienes se preguntan qué es de la cantante catalana, pues a diferencia del puertorriqueño, ella ha abandonado las redes sociales y dejado en ascuas a sus más de veintisiete millones de seguidores.
La última publicación de la cantante se remonta ni más ni menos que al 24 de julio, cuando puso fin a su Motomami World Tour con un concierto en el Festival Lollapalooza de Paris. «Motomami ha sido un huracán que ha traído y se ha llevado tantas cosas en mi vida que no sé ni por dónde empezar. Gracias a todxs lxs motomamis del mundo x haberme dado tanto amor durante todo este tiempo», escribió en el post junto a un carrusel de imagen de lo que había sido la gira. Unas palabras que poco después, cobrarían más sentido si cabe.
Rosalía y Rauw Alejandro en Nueva York / Gtres
De esta forma, la interprete de Bizcochito y Despechá, habría encontrado el consuelo en sus familiares y amigos más allegados y, especialmente, en su madre y su hermana, quienes desde que Rosalía alcanzara la fama, han estado involucradas en la carrera profesional de la artista. «Mi madre y mi hermana son como pilares para mí. Están siempre ahí, como un faro. Son mujeres muy fuertes, que me inspiran y que siempre me acompañan en todas las aventuras que les propongo», ha confesado la propia Rosalía en varias de sus entrevistas.
Su progenitora, Pilar Tobella, cabe recordar que es, de hecho, la administradora única de Motomami SL, la empresa que controla los destinos económicos de Rosalía, y quien está al cuidado de todos los pasos y decisiones profesionales de Rosalía sobre todo desde que a principios de este año 2023, la natural de Sant Esteve Ses Rovires decidiera terminar su relación profesional con su mánager, Rebeca León «de manera amigable y en los mejores términos», según desvelaron fuentes cercanas a la ex representante, que es CEO y fundadora de la empresa Lionfish. Asimismo, Tobella es quien llevó a Rosalía, con apenas diez años, a su primera escuela de música para que se formara como cantante, y quien la apuntó, además a clases de baile, jazz y guitarra.
Rosalía durante uno de sus conciertos / Gtres
Por su parte, su hermana, Pilar Vila, conocida como la Pili, es también uno de los pilares fundamentales de la vida de la cantante. Graduada en Humanidades por la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, aunque dedicada a la fotografía, la joven de treinta y tres años ayuda a Rosalía en lo que al terreno del estilismo y los detalles visuales de sus shows se refiere. «Cuando éramos pequeñas nos poníamos a dibujar juntas y luego a hacer vestidos. Cortábamos tela las dos. Lo seguimos haciendo. En casa siempre ha habido revistas de moda, libros, pelis… Eso hace que tengamos un mundo referencial muy parecido. Trabajar con ella no es trabajar, es ser nosotras como siempre hemos sido», declaró Rosalía en una ocasión.