En casa, el polvo suele estar en diversos rincones. Si nos centramos en una estancia en particular, esto depende de los muebles y superficie. Así queremos analizar qué lugar de la cocina acumula más polvo para tenerlo en cuenta y limpiar a diario. Pues en esta zona hay alimentos y bebidas que pueden verse perjudicados.
No es el fregadero porque ahí está el agua que emana de forma continua, ni tampoco en la repisa, ya que la lavamos continuamente y además no es una zona donde se suela acumular este polvo.
Qué lugar de la cocina acumula más polvo
Muebles
En este caso, podemos hablar de varios. Por un lado, están los muebles, pues siempre que haya de madera u otros materiales, es allí donde el polvo prolifera. Además se destaca también la zona de debajo de los muebles porque además es la que menos solemos limpiar.
Estanterías de madera
Si tenemos estanterías para dejar alimentos, botellas y cajas, y además suelen ser de madera, entonces allí también hace acto de presencia el polvo.
Mesas y sillas
También está la mesa y las sillas, en este caso también si es de madera, pues atrae más este polvo.
Lámparas colgantes
Mientras que, si tenemos lámparas colgantes, por aquello de dar más luz a esta zona de la mesa, es también foco para acumularlo.
Las partes más altas de los armarios
Otra cosa son las partes más altas de los armarios. Allí no solemos llegar y nos cuesta acceder. Es una zona donde también el polvo es realmente importante y que debe quitarse también una vez a la semana.
En enchufes y cables
Si hay enchufes y cables, verás que también suelen llenarse de polvo en comparación con otras zonas de este espacio.
Encimera
Normalmente acumula grasa, pero polvo también. Así que debemos hacer una repasada general si no, pueden acumularse ambos materiales.
Cuándo limpiar estas zonas
Aunque la cocina es una de las zonas de la casa que más se limpian a diario, es verdad que más allá del fregadero y silestone, los fogones o zonas de calor como la inducción, el resto de zonas no se hacen a fondo a diario.
Es por ello que debemos fijar un día a la semana para acabar con este polvo que se concentra en las zonas antes vistas, si bien lo ideal es que se pueda dar un repaso a diario. Y luego dejar un día semana o cada dos para esta tarea.
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