El ministro francés de Justicia, Eric Dupond-Moretti, ha sido imputado este viernes por presunto conflicto de interés, según han informado sus abogados. El abogado de 60 años, uno de los fichajes estrella del presidente Emmanuel Macron hace apenas un año, era uno de los abogados penalistas más famosos del país. Ahora se le acusa de haber abusado de su cargo de ministro para ajustar cuentas con algunos de sus rivales en la carrera jurídica.
Las acusaciones tienen que ver con las investigaciones sobre tres jueces que ordenaron a la policía en 2014 escudriñar los registros telefónicos de decenas de abogados y magistrados, entre ellos Dupond-Moretti, en el marco de una investigación sobre el expresidente Nicolas Sarkozy. Ahora el poder judicial acusa a Dupond-Moretti de una caza de brujas contra aquellos jueces.
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Según la ley francesa, cuando la justicia imputa a alguien significa que hay “pruebas serias o consistentes” que implican al sospechoso. Es un paso más que puede derivar en un juicio, pero no equivale a una acusación. La persona puede ser acusada más adelante si surgen más pruebas o se puede abandonar la investigación.
Dupond-Moretti fue interrogado durante horas por el Tribunal de Justicia de La Republique, un tribunal especial que se ocupa de las denuncias contra ministros en ejercicio. En enero, el tribunal inició una investigación después de que un grupo anticorrupción y tres sindicatos de magistrados presentaran denuncias por conflicto de intereses contra Dupond-Moretti.
Dupond-Moretti ha negado las acusaciones, afirmando que se limitaba a actuar siguiendo las recomendaciones de su personal para investigar posibles fallos de los magistrados que supervisaron las incautaciones de los registros telefónicos. El ministro ha apuntado que los sindicatos estaban utilizando las acusaciones para frenar sus reformas.
Si Dupond-Moretti es acusado de conflicto de intereses por una persona en posición de autoridad pública, es probable que Macron afronte peticiones de la oposición para que lo destituya. Hasta ahora, el entorno del ministro ha rechazado esos llamamientos, insistiendo en que tiene el apoyo del presidente.
No sería, en todo caso, el primer miembro del equipo de Macron en ser acusado de un delito. Poco después de su elección en 2017, Macron destituyó a su estrecho colaborador Richard Ferrand como ministro de Cohesión Territorial después de que se le pusiera bajo investigación por las denuncias de que favoreció a su esposa en un lucrativo acuerdo inmobiliario con una caja de seguro de salud pública. Más tarde, Ferrand volvió a desempeñar un papel más importante como presidente del Parlamento, puesto que conservó tras ser acusado de conflicto de intereses.
Un miembro del gabinete dijo a la agencia France Presse que no estaba seguro de que el combativo Dupond-Moretti, famoso por su historial de conseguir la absolución de sus clientes, pudiera sobrevivir al escándalo si era acusado.
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