El cocido es quizás uno de los platos que no puede faltarnos nunca en invierno, pero es posible que tras cocinarlo y comerlo, nos sobre y decidamos dejar que se enfríe fuera de la nevera antes de guardar esas sobras. Algo que deberíamos evitar por completo ya que corremos el riesgo de que cuando vayamos a comer ese cocido sobrante nos acabe sentando mal. ¿Por qué motivo? Debido precisamente al hecho de haber dejado que el cocido se enfríe fuera de la nevera por lo que se puede propiciar la aparición de diversos organismos que al final acabaremos ingiriendo.
No dejes enfriar el cocido fuera de la nevera
Muchos son los ingredientes, desde garbanzos a verduras pasando por el chorizo, la morcilla o el jamón, que intervienen en la elaboración de un buen cocido. Y a todo el mundo le gusta disfrutar de este plato de cuchara, que es típico del invierno. Sin embargo cuando lo cocinas y lo dejas enfriar debes tener en cuenta que hacer esto implica que corramos el riesgo de sufrir gastroenteritis.
Debes saber que existen unas pequeñas esporas que se conocen como Clostridium perfringens, y que se corresponden con una bacteria que causa intoxicación alimentaria. Dichas esporas pueden sobrevivir en el cocido aunque este sea un guiso y se cocine de la forma correcta y realmente afectan a la salud. De hecho, los datos de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid señalan que dicha bacteria fue responsable, en los años 2016 y 2017 de 13 de los 304 brotes de origen alimentario notificados, con 532 casos asociados, afectando principalmente en comedores escolares y también, residencias.
De qué modo prevenir la presencia de bacterias en el cocido
Si nos comemos nuestro cocido recién cocinado no nos pasará nada a pesar de la presencia de esporas de Clostridium perfringens, pero si dejamos que nuestro plato se enfríe sin más fuera de la nevera, dichas esporas germinarán lo que se traducirá en una multiplicación de las bacterias dentro de nuestra comida. Por ello, cuando la comamos, se liberarán toxinas que afectarán a nuestro intestino y nos producirán una gastroenteritis.
Un riesgo que aumenta en las mencionadas residencias y comedores, así como en los restaurantes donde la cantidad de cocido que se prepara es mayor por lo que se dificulta el enfriamiento y con ello que aumente mucho más esa presencia de bacterias. Por ello desde la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad dan a conocer algunas pautas para que podamos proceder de la forma correcta, en el caso de que el cocido no se vaya a consumir entre las 2 y 4 horas después de que se haya cocinado:
- Recalentar de forma correcta: A la hora de recalentar el cocido debemos alcanzar una temperatura de al menos 65 ºC en el centro del alimento y además comer de forma inmediata.
- A la hora de conservarlo en frío: Lo primero es cambiar el recipiente de cocinado a uno de conservación. Dejar que se enfríe pero cuidado con el tiempo. Generalmente en menos de dos horas ya habrá alcanzado los 10 grados, momento en el que podemos meterlo en la nevera donde debe conservarse por debajo de los 4 grados.
- Si se mantiene en caliente: debe estar a 65 grados de temperatura hasta que vayamos a comerlo. De ahí que lo mejor de todo es que una vez cocinado, nos lo comamos sin esperar.
Con estos sencillos consejos podremos saborear nuestro cocido, algo que se aprecia mucho cuando hace frío, y sin que corramos el riesgo de acabar padeciendo unas gastroenteritis.
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