El éxito de Carlos Alcaraz es indudable. El joven murciano sigue acumulando trofeos en las pistas de tenis, llegando a ser considerado como el «sucesor de Rafa Nadal», el deportista español que hasta ahora había conseguido mayores títulos con la raqueta en su mano. Pero, lo cierto es que, más allá de su don en el terreno de juego, su figura levanta pasiones por donde pasa, generando un gran interés para un alto porcentaje de la sociedad. Sin ir más lejos, hace tan solo unas semanas, eran varios medios los que se hacían eco de nuevas informaciones que daban pistas sobre su actual situación sentimental. Según desveló Laura Fa en el podcast En todas las salsas, el tenista habría tenido una relación sentimental con Ana Mena, la malagueña de 26 años que está triunfando sobre los escenarios.
Por el momento, ninguno de los dos se ha pronunciado al respecto pero, al parecer, más allá de sus supuestos «affaire» en el terreno amoroso, lo cierto es que tendría algún que otro vínculo con otros rostros femeninos y conocidos del panorama nacional. Como se sabe, son muchas las marcas que se han interesado por el tenista a la hora de promocionar cualquier campaña publicitaria, queriendo utilizar su rostro como imagen principal. Entre todas, una de las colaboraciones que más difusión consiguió fue la protagonizó de la mano de El Pozo Alimentación, la empresa alimentaria española con sede en Murcia posicionada como líder en materia cárnica.
Precisamente es este proyecto el que le une indirectamente con Mar Torres, la influencer que mantuvo una relación sentimental con Froilán. La joven pertenece a una multimillonaria familia que se encuentra detrás la dirección de la empresa mencionada líneas más arriba. Su abuelo, Tomás Fuentes, es uno de los hombres más ricos de España, de hecho, según la lista publicada por Forbes en 2017, estaría posicionado en el puesto número 24 en el ranking. Es el dueño del grupo Fuertes, un holding formado por más de veinte empresas entre las que se encuentra El Pozo Alimentación.
Según publicó La Información, la empresa tiene unas ventas de 1.128 millones de euros al año, unos beneficios que se traducen cercanos a los 62 millones de euros, además de un activo de casi 700 mllones. Unas cifras que sin duda posicionan a Mar Torres como la heredera de un gran imperio del que forman parte varios rostros conocidos del país como imagen de los productos en venta. No obstante lo cierto es que, a juzgar por el contenido publicado y por la hemeroteca registrada, no existe ningún material que confirme que ambos tienen algún tipo de relación de amistad, por lo que da pie a pensar que seguramente no se conozcan o no hayan tenido el placer de coincidir.
Cabe destacar que, desde hace unos meses, Mar Torres dejó su vida en Madrid para desplazarse a Murcia, la ciudad natal de Carlos Alcaraz, desde donde ha decidido comenzar a trabajar en las instalaciones de El Pozo, el negocio familiar. Pese a su nueva vida cercana al mar mediterráneo, lo cierto es que sus viajes a la capital siguen siendo constantes ya que, más allá de su función laboral en la compañía señalada no quiere dejar apartada su faceta como influencer.