Los precios del oro tocaron un mínimo de casi siete meses este miércoles 6 de julio como consecuencia del fortalecimiento del dólar y el aumento de las apuestas por la subida de las tasas de interés, factores que merman el atractivo del lingote, que no rinde intereses.
Hasta las primeras horas de este 6 de julio, el oro al contado cayó un 0.2% y se cotizó en 1,760.90 dólares por onza, luego de que perdió un 2.6% el martes.
En tanto, el dólar subió a un máximo de casi dos décadas, lo que genera que el lingote, que cotiza en dólares, sea menos atractivo para los compradores extranjeros.
“Dado que se espera que la Reserva Federal de Estados Unidos suba las tasas de forma agresiva en las próximas reuniones, es de esperar que el oro se mantenga bajo presión a corto plazo”, dijo el analista de UBS Giovanni Staunovo, y añadió que el oro podría bajar hasta los 1,700 dólares la onza a finales de año.
El lingote ha enfrentado dificultades por el alza de tasas a nivel mundial y del rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, que aumentan el costo de oportunidad de mantener el metal dorado.
Por otro lado, el euro tocó este miércoles un nuevo mínimo de dos décadas, ya que el temor a la subida de los precios de la energía y a la posible escasez ensombrece la economía del bloque, mientras que la demanda de activos de refugio llevaba al dólar a nuevos máximos de 20 años.
*Se espera que todos los yacimientos de petróleo y gas afectados por una huelga en el sector petrolero noruego vuelvan a funcionar a pleno rendimiento en un par de días, dijo el miércoles Equinor.
Mientras tanto, Goldman Sachs elevó sus previsiones sobre el precio del gas natural, afirmando que el restablecimiento completo de los flujos de gas ruso a través de Nordstream 1 ya no es el escenario más probable.
Los analistas esperan un rápido resurgimiento de los precios del petróleo, ya que persiste la escasez de oferta y los diferenciales del primer mes se han mantenido a pesar de la caída de precios del martes.
Con información de Reuters.
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