Aprovechar un fin de semana, un puente festivo o unas vacaciones para poder visitar alguno de los muchos pueblos de España es sin duda una experiencia de lo más recomendable. Son muchos los pueblos de nuestro país que tienen un encanto especial gracias a que conservan sus casas originales, tienen importantes monumentos o cuentan con castillos o murallas que resultan sorprendentes, pero entre todos ellos destaca uno de forma especial y que muchos conocen como el pueblo de España por el que no ha pasado el tiempo.
El pueblo de España por el que no ha pasado el tiempo
Si quieres conocer realmente uno de los pueblos más bonitos de cuantos tenemos en nuestro país debes dirigirte a Cáceres y visitar la localidad de Coria que es además la más destacada del Valle del Alagón. Un pueblo que cuenta algo más de 12.000 habitantes siendo así el cuarto municipio más poblado de la provincia de Cáceres y que cuenta con conjunto monumental, declarado bien de interés cultural que provoca el que nada más llegar nos de la sensación de que hemos hecho un viaje al pasado.
Con una gran vinculación a la cultura del toro (durante las fiestas de San Juan se suelta a un toro bravo por el recinto amurallado), el pueblo de Coria tiene un romano y árabe. Sus murallas, con 20 torres cuadradas y cuatro puertas, son un magnífico ejemplo de la arquitectura romana de defensa de los siglos II al IV, conservando aún en ellas algunas de sus estelas funerarias originales.
Todo lo que puedes ver en Coria
Destaca también en Coria la catedral de la Asunción, en la que destaca la portada plateresca del Perdón aunque fue construida en una variedad de estilos, dado el largo tiempo que tomó su construcción, que comenzó en el siglo XV en estilo gótico-renacentista. A pocos kilómetros encontramos el seminario mayor, un edificio del siglo XVII que conserva los restos de un monumento funerario romano así como el Castillo de Coria que data del siglo XV y en el que se mantiene todavía su torre del homenaje, así como el «castillejo», un baluarte. El castillo fue construido por los Duques de Alba encima de una una antigua fortaleza de los templarios
Otros edificios destacados del patrimonio monumental de la villa son el convento de Madre de Dios, del siglo XV, situado dentro del recinto de la muralla; el palacio episcopal, construido en 1626; la iglesia de Santiago, del siglo XVI, con retablo manierista e imágenes de los siglos XVI al XVIII; la prisión real, actual sede del Museo de la Ciudad; la prisión eclesiástica, construida en 1760; y un jardín botánico en las afueras.
No te pierdas además, el puente de piedra, obra de arquitectura civil del Renacimiento, que se erige por encima de un cauce seco desde 1590, cuando el río Alagón se desvió naturalmente de su curso a consecuencia de una fuerte crecida.
Precisamente en agosto el rio cobra protagonismo ya que es cuando se celebra el Descenso del Alagón, cuyo recorrido, de casi 19 kilómetros de longitud y de dificultad media-baja, comienza en el Puente de la Macarrona, en Riolobos, y acaba en el Puente de Hierro, en Coria.
Source link