¿Se te ocurre un mejor plan para descansar y desconectar de la rutina que hacer una escapada rural? En España hay rincones maravillosos, como este pueblo de Barcelona, en los que disfrutar de un viaje en el tiempo hasta la Edad Media. Lo hemos descubierto gracias a la cuenta de Instagram @viajeros_curiosones, y es un sitio increíble para una excursión de día.
Se trata de Rupit, una pequeña localidad de 275 habitantes. Su origen se remonta al siglo XII de la mano de familias nobles, y uno de sus principales atractivos es el puente colgante que conecta con el casco antiguo. Según recomienda @viajeros_curiosones, «Lo mejor que hacer es perderse por sus calles. Y no perderse la Casa del Herrero, la Casa del Boticario ni la Notaría Soler».
Se encuentra a 1 hora y 15 minutos de Gerona y a 1 hora y 30 de Barcelona, así que Rupit es un pueblo medieval estupendo para ir un sábado o un domingo.
¿Qué ver en Rupit?
Hay quienes lo consideran el pueblo medieval más bonito de la provincia de Barcelona, y en cuanto lo conozcas entenderás por qué. Mantiene la estructura original de callejuelas estrenas y empedradas y casonas de piedra.
Pasear por el casco antiguo de Rupit es una verdadera experiencia para todos los sentidos. Las casonas de piedra conservan sus balcones de madera, sus ventanas labradas, sus grandes portales y sus escudos. La mayoría datan de los siglos XVI al XVIII.
La Iglesia de San Miguel de Rupit es el principal templo religioso del municipio. Alberga un retablo barroco de Sant Esteve de gran valor histórico.
Alrededores
En los alrededores de Rupit hay varias rutas de senderismo que merecen mucho la pena porque los paisajes son impresionantes. La más conocida de todas es la que llega hasta el Salt de Salent. Se trata de una ruta circular muy sencilla de 5,5 kilómetros, la cual se tarda aproximadamente dos horas en completar.
El paseo hasta la Ermita de Santa Magdalena desde Rupit también es muy interesante. Apenas hay 1,2 kilómetros desde el casco antiguo, y se tardan menos de veinte minutos en ir y volver. La ermita fue construida en el siglo XVII y, aunque está cerrada, las vistas de Rupit desde aquí son fantásticas.
La Iglesia de San Juan de Fábregas es otro de los lugares que más llaman la atención de la zona. De estilo románico y restaurada en la segunda mitad del siglo XX, la distancia hasta ella desde el centro de Rupit es de 2,5 kilómetros.