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El Real Madrid lleva a Javier Tebas a los tribunales por el caso CVC

Florentino Pérez, presidente del Real Madrid.
Florentino Pérez, presidente del Real Madrid.

La Asamblea de Clubes de LaLiga todavía no ha votado el acuerdo con el fondo de inversión CVC y el caso ya está judicializado. El Real Madrid, el gran opositor a esta operación junto al Barcelona, anunció este martes que ejecutará “acciones legales, tanto civiles como penales”, contra el presidente de la patronal, Javier Tebas, el responsable del fondo, Javier de Jaime Guijarro, y el propio CVC. El club blanco advirtió, además, de que emprenderá los pasos que considere oportunos en los tribunales “para anular y dejar sin efecto los posibles acuerdos que adopte la Asamblea”.

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Este jueves, las 42 entidades de Primera y Segunda División votarán si aceptan la entrada de este fondo de inversión a cambio de una inyección de 2.668 millones de euros, a devolver en préstamos sin intereses a 40 años, por la cesión del 10,95% de los derechos de la competición para el próximo medio siglo. El pacto solo saldrá adelante si recibe, al menos, 33 votos favorables. El sufragio será secreto y cabe la abstención. El pasado martes, los 14 miembros de la comisión delegada ratificaron el texto por unanimidad. Entre los presentes estaban el Atlético, el Villarreal, el Sevilla, el Betis y la Real Sociedad.

La respuesta de Javier Tebas al comunicado del Real Madrid fue muy dura e inmediata, y agrietó aún más sus malas relaciones: “El método amenazante que desde hace años utiliza FP [Florentino Pérez] en privado lo traslada ahora a lo público. Clubes e instituciones llevamos años soportando sus amenazas. Desde 2015 contra la venta centralizada, las impugnaciones constantes de acuerdos, la Superliga… El Real Madrid merece más”, escribió en su perfil de Twitter. El enfrentamiento entre ambos dirigentes viene de largo y en los últimos meses se ha avivado por el episodio de la Superliga (impulsada por Pérez y rechazada por Tebas) y ahora por la posible entrada de este fondo de inversión.

El director corporativo de LaLiga, José Guerra, señaló este lunes en conversación con este periódico, antes del anuncio de las acciones judiciales del Real Madrid, que su organismo se había asegurado de que el acuerdo firmado con CVC “respetaba la legalidad y cumplía con la normativa existente”. A su juicio, la entrada del fondo resulta imprescindible para “mantener la competitividad” y acortar distancias con la todopoderosa Premier inglesa. Y, según la patronal, si el texto recibe la bendición de la Asamblea, el voto en contra de los dos grandes del fútbol español no impediría su puesta en marcha. “Otra cosa”, matizó Guerra a EL PAÍS, “es que un club decida no usar el dinero disponible”, en referencia a los créditos, pero eso, en ningún caso, añadió, les dejaría fuera del nuevo marco legal del hipotético acuerdo. Siguiendo este argumento, la vía para salirse del pacto serían los tribunales, la que inició precisamente este martes el Real Madrid.

La guerra de cifras sobre el impacto y necesidad de este posible acuerdo es total. Por un lado, el club blanco, a partir del informe de una consultora contratada por él, subraya que la cantidad de dinero que ahora recibiría cada uno de los 42 equipos sería muy inferior a los ingresos que podrían obtener cada uno de ellos sin la entrada del fondo de inversión en los 50 años siguientes, el periodo de vigencia de este posible pacto con CVC. La consultora ha realizado un estudio al que han tenido acceso todas las entidades de Primera y Segunda con la intención de que voten en contra en la reunión del jueves. En él se compara, club a club, cuánto percibirían a corto plazo en virtud del acuerdo con el fondo y, según sus cálculos, cuánto dejarían de meter en caja. En el Barcelona, por ejemplo, el desfase sería de 2.366 millones; en el Madrid, de 2.281; en el Atlético, de 1.919; y en el Valencia, de 1.151.

LaLiga, mientras, considera que estas estimaciones “no son realistas” y que responden a “interpretaciones interesadas”. Por ejemplo, descarta que el torneo pueda crecer a un ritmo global del 3% en los próximos 50 años, tal como se apunta en el escenario “conservador” que dibuja la consultora del Real Madrid. “La Ligue 1 francesa, la Serie A italiana y la Bundesliga alemana han caído en sus mercados nacionales e internacionales. En la Premier, el nacional se ha quedado a cero gracias a que el Gobierno ha echado una mano, pero en algunos países extranjeros ha descendido. Que aquí se asuma que vamos a subir un 3% perpetuamente es una previsión nada conservadora. O el consultor no ha estudiado el caso o ha puesto un número cualquiera encima de la mesa. No me merece mucho respeto ese cálculo”, rebatía este lunes su director corporativo en conversación telefónica con este periódico.

Las cifras a medio y largo plazo que pone sobre el tapete la patronal son más modestas. En los nueve años siguientes, el incremento del negocio futbolístico en España (en su mayor parte procedente de los ingresos televisivos) sería del 3,1%, próximo a lo que vaticina la consultora del Real Madrid. Las divergencias vienen cuando se ponen las luces largas. Mientras el club blanco, apoyado en esta guerra por el Barcelona, calcula que la industria puede escalar a un ritmo global del 3% en el próximo medio siglo, LaLiga rebaja de forma notable ese escenario: dentro de 13 temporadas, en la 2034-35, quedaría en el 1,3%, menos de la mitad. Y eso con el acuerdo con CVC. “Si no, las cifras serían aún menores, sin duda”, matiza José Guerra. “No es posible crecer siempre al 3%. Cuanto más grande eres, más difícil te resulta”, comenta.

La tensión sube cada día en la previa de una votación muy delicada. La entrada del fondo de inversión aportaría a los clubes una cantidad de dinero muy importante en un momento de grandes estrecheces financieras por la pandemia (ver gráfico). Según el cálculo realizado en base al reparto por derechos televisivos entre 2016 y 2020, el Barça recibiría 253 millones; el Madrid, 241; el Atlético, 181; el Sevilla, 119; y el que menos, el Elche, 10. El 70%, eso sí, deberían ir a infraestructuras. El 15%, a refinanciar deuda o compensar pérdidas; y solo el 15% restantes a inscribir jugadores. En todo caso, serían inyecciones altas en este contexto de penurias e incertidumbres. La duda es hasta qué punto la operación es cortoplacista y los clubes no podrían obtener más en este medio siglo siguiente sin ceder el 10.,95% de su negocio a este fondo. Un debate azuzado por la guerra entre Florentino Pérez y Javier Tebas.

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