PreviaDirectoBenzema, este sábado en el entrenamiento del Real Madrid.Real Madrid (Real Madrid/EFE)
Como en un partido de tenis, el Madrid se dispone en los próximos cuatro días a restar para sentirse virtualmente campeón de Liga. Con 12 puntos de ventaja sobre el Barcelona (este con un partido menos) y el Sevilla, y siete jornadas por disputar, el equipo de Carlo Ancelotti visita este domingo el Pizjuán (21.00, Movistar LaLiga) y el miércoles viaja a Pamplona para medirse a Osasuna. Dos salidas crudas e incómodas que, si las resuelve con éxito o logra mantener la ventaja, le dejarían ya definitivamente a un peldaño del título. En cambio, si falla y sobre todo el conjunto azulgrana aparca el gatillazo europeo y prolonga su racha en el torneo doméstico, alimentaría las ilusiones del segundo pelotón porque al Madrid todavía le quedaría por acudir al Metropolitano y desgastarse en las semifinales de Champions contra al City. Así que en cuatro días los blancos pueden dar casi por liquidada la Liga o ver cómo los frentes se le acumulan. En sus manos está.
El físico no será un problema ni una coartada para encarar al conjunto de Julen Lopetegui tras la agonía del Chelsea. “Ha habido tiempo suficiente para recuperar bien a todos. Estamos preparados, mental y físicamente. El martes sufrimos más en los 90 minutos que en la prórroga. Queremos hacer un partido enérgico y con intensidad”, aseguró este sábado el técnico italiano, que no contará con Casemiro por tarjetas, ni con los lesionados Mendy y Marcelo en el lateral izquierdo. El hueco en la media lo puede cubrir con las piernas juveniles del revitalizado Camavinga o recuperando el tercer atacante puro. En ese caso, Rodrygo, otra vez puntual en Champions, partiría con ventaja sobre un Asensio que ha perdido el paso (sin minutos en cuartos). En la defensa, Nacho o Alaba se situarán en el flanco zurdo.
El Sevilla, mientras, trata de tomar aire tras un último mes muy torcido que le expulsó de Europa por segunda vez este curso, con el golpe extra de quedarse fuera de la final de la Liga Europa en su estadio, y que le alejó de la cabeza de la Liga después de un 2022 en el que fue el único competidor del Madrid. Ahora solo aspira a la Champions. Un objetivo con mucha miga por el dinero en litigio, que alteraría sensiblemente su presupuesto, y porque en el retrovisor aparece nada menos que su némesis, el Betis, a tres puntos aunque con un encuentro más tras su empate de este viernes en Anoeta. Por si su rivalidad no era ya suficiente, ahora además la guerra se traslada a Europa.
El fútbol, según Ancelotti
Lopetegui rechazó este sábado hacer “ningún tipo de cuentas” o pararse a pensar en lo que hubiera supuesto este duelo si hubiera mantenido el ritmo de los blancos. El entrenador vasco matizó que solo le interesaba este partido y lograr el objetivo de la Liga de Campeones. Nada más, y nada menos. Él nunca le ha ganado al Madrid en los cinco choques previos y este domingo sigue teniendo las bajas de larga duración de Fernando y Suso. Por su parte, Delaney y Acuña salen de problemas físicos.
Una previa de un duelo clave de Liga en el que, eso sí, todavía se escuchaba el eco de la jornada europea y sus recurrentes debates futbolísticos. ¿A qué le da más importancia, a jugar bien o a ganar? ¿Es el Barça el club más difícil, como dijo Xavi?, le preguntaron a Carlo Ancelotti, que entró al trapo con ganas. “Hasta que las reglas no cambien, el fútbol es atacar y defender. Ya sea en bloque bajo, medio o alto. Nadie me va a cambiar la idea de esto. En Mánchester, el Atlético defendió muy, muy bien. Luego se puede opinar si podía hacer más con el balón. Sí, podía hacer más. Pero su defensa fue muy, muy buena”, zanjó el italiano, siempre dispuesto a mediar en este tipo de cuestiones. Una teoría general de la que su equipo tendrá que echar mano para acercarse a la Liga.
Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.