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El Reino Unido ahora tiene una ley en contra de upskirting

El Reino Unido ahora tiene una ley en contra de upskirting

Un cambio de ley que entra en vigencia en el Reino Unido hoy hace que la práctica altamente intrusiva de "upskirting" sea ilegal.

El gobierno dijo que quiere que la nueva ley envíe un mensaje claro de que tal comportamiento es criminal y no será tolerado.

Los perpetradores en Inglaterra y Gales enfrentan hasta dos años de prisión bajo la nueva ley si son condenados por tomar una fotografía o un video debajo de la ropa de una persona con el fin de ver su ropa interior o genitales / glúteos sin su conocimiento o consentimiento para la satisfacción sexual o para causar humillación, angustia o alarma. (Escocia, hogar de la ropa masculina tradicional conocida como la falda escocesa, ha tenido una ley contra el upskirting desde 2010).

Se han llevado a cabo acciones judiciales por desvalorizar en Inglaterra y Gales en virtud de un delito de derecho común existente que indigna a la decencia pública. Pero luego de una campaña iniciada por una víctima de la hipocresía, el gobierno decidió legislar para llenar los vacíos en la ley y convertirla en un delito sexual.

El proyecto de ley Voyeurism (Ofenses) (No. 2) se presentó el 21 de junio del año pasado y hoy gana el consentimiento real.

Cuando se comete el delito de upskirting para obtener gratificación sexual, puede resultar que los delincuentes más serios sean ubicados en el registro de delincuentes sexuales.

En virtud de la nueva ley, las víctimas también tienen derecho a protección automática, como por ejemplo, ser identificadas en los medios de comunicación.

Si bien el gobierno del Reino Unido pretende que el cambio de ley envíe un mensaje claro de que el upskirting es socialmente inaceptable, no hay duda de que la legislación por sí sola no puede hacer eso. La aplicación robusta es esencial para contrarrestar cualquier actitud problemática que pueda contribuir a fomentar el uso antisocial de las tecnologías en primer lugar.

Por ejemplo, en Corea del Sur, una ley contra el abuso de personas conlleva una sentencia máxima de cinco años en prisión, pero la legislación no ha logrado frenar una epidemia de delitos alimentados por el acceso barato a diminutas cámaras espías escondidas en el sexismo social: este último también parece influir. cómo la policía decide defender la ley, con los activistas que se quejan de que la mayoría de los perpetradores consiguen pequeñas multas.


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