Aunque el chef tiene su propio restaurante y con mucho éxito, descubrimos cuál es el restaurante bueno, bonito y barato al que Karlos Arguiñano no puede resistirse. Porque los cocineros, cuando van a otros locales a comer, saben escoger bien, como no podría ser de otra manera.
Descubrimos a qué lugar suele comer y de alta calidad, donde la cocina casera y tradicional es importante, tal como hace gala de ello.
¿Cuál es el restaurante bueno, bonito y barato al que va Karlos Arguiñano?
Si bien va a diversos locales, parece que su preferido es el restaurante es Sidrería Izeta, que encontramos en la carretera de Aia, Guipúzcoa. Se trata de un lugar con larga tradición e historia, que ahora también adquiere protagonismo por el famoso chef que lo da a conocer en sus presentaciones de libros, por ejemplo.
La historia de la Sidrería Izeta es la historia de una familia que durante cinco generaciones ha dedicado su vida al mundo de la sidra.
En 1983, y bajo el mando de Manuel Iruretagoiena, Izeta Sagardotegia abrió sus puertas al público en el caserío Izeta Goikoa. Tres décadas después, el restaurante se ha convertido en un lugar particular, garantía de máxima calidad y del sabor más auténtico.
Este restaurante está formado por cuatro comedores y tiene capacidad para acoger a más de 300 comensales. También posee una terraza cubierta y acondicionada, que tiene cabida para unas 20 personas más.
Cuentan con diversidad de platos en carta y además un menú diferente cada día. Aunque el menú cambia diariamente siempre hay opción de elegir entre cuatro entrantes, tres segundos platos, postre, café y bebida, y todo ello, por sólo 12 euros.
Además de este menú, hay también para grupos. Los distintos menús están formados por platos de la carta y se componen mayormente de tres entrantes a elegir, más carne o pescado.
La carta, también asequible, engloba pescado y carne que preparan con gran mimo y esmero en el local, además de la buena sidra de la bodega.
Pues hay que destacar que tienen una sidrería donde producen dos sidras distintas, por un lado la sidra IZ, y por otro, nuestra sidra Izeta, la cual producen desde sus inicios. Aunque ambas dos son producidas casi en su totalidad con manzanas procedentes de sus propios manzanales, el certificado de Sidra Natural del País Vasco otorga a nuestra Sidra IZ la garantía de una producción 100% autóctona.
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