Hay un utensilio que todos hemos utilizado en más de una ocasión a la hora de hacer viajes largos: la almohada de viaje. A la hora de dormir en el avión o en el coche, resulta muy complicado encontrar una postura que nos resulte cómoda, y esto hace que nos despertemos con dolor de cuello. Con la almohada de viaje podemos dormir durante el trayecto sin renunciar al confort, y disfrutar de un descanso reparador.
A esto hay que sumar que alivia en gran medida de los dolores. ¿Cuántas veces te has despertado con dolor de cabeza después de quedarte dormido durante un viaje largo? Seguro que más de una. Y es que, la postura del cuello influye en gran medida en el dolor de cabeza, y también en el dolor de cervicales.
¿Cómo usar correctamente este utensilio?
Parece que utilizar este utensilio es lo más fácil del mundo, pero lo cierto es que llevamos toda la vida haciéndolo mal. Gracias a TikTok, hemos descubierto cuál es la forma correcta de usar la almohada de viaje.
Normalmente, solemos colocar la almohada en forma de «C», de tal manera que la parte gruesa y cerrada queda en la parte posterior del cuello, y la parte más fina y abierta en la parte delantera. Sin embargo, el usuario @Siydneyraz asegura que hay que colocarla del revés.
En el vídeo publicado en la red social, coloca la almohada de viaje de esta manera, y muestra lo cómodo que se siente y lo fácil que resulta que el cuello tenga una buena postura de esta manera. Sin lugar a dudas, parece un muy buen truco para hacer viajes largos sin tener que preocuparnos por el dolor de cuello y de cabeza.
@sidneyraz you can actually sleep on a flight #traveltipsandtricks #inmy30s
Consejos prácticos para un viaje largo
A la hora de hacer un viaje largo, además de colocar la almohada correctamente, hay otros consejos que debemos poner en práctica. Si el viaje es en avión, es fundamental elegir el mejor asiento. El asiento del pasillo es una muy buena opción para poder estirar las piernas durante el vuelo.
Por supuesto, nada de ropa ajustada para viajar. Aunque sea verano, conviene llevar una sudadera o una chaqueta porque puede hacer frío en el avión. Un conjunto de chándal es la mejor alternativa.
Durante el vuelo, lo mejor es beber agua para mantenernos frescos e hidratados. El alcohol y los refrescos pueden inflamar el estómago y hacernos sentir incómodos.
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