Las concentraciones de los gases de efecto invernadero alcanzaron nuevos máximos históricos en 2021, reveló la Organización Meteorológica Mundial (OMM), al tiempo que advirtió sobre las amenazas del cambio climático.
El Boletín de la OMM sobre los Gases de Efecto Invernadero explica que en 2021 se registró el mayor incremento interanual de las concentraciones de metano en 40 años, mientras que los niveles de dióxido de carbono fueron superior a la tasa media de incremento anual de los últimos 10 años. Estos niveles siguen creciendo en 2022 en todo el planeta.
En 2021, las concentraciones de dióxido de carbono estuvieron 149% sobre los niveles preindustriales, principalmente por las emisiones de la quema de combustibles fósiles y la producción de cemento. A su vez, las de metano alcanzaron 262% más y las de óxido nitroso 124%, reveló el mecanismo de la ONU.
Entre 1990 y 2021, el calentamiento del clima provocado por los gases de efecto invernadero aumentó casi un 50%; el dióxido de carbono contribuyó en aproximadamente un 80%.
La agencia meteorológica de las Naciones Unidas advirtió que, a la larga, los océanos y los ecosistemas terrestres pueden perder eficacia como “sumideros” que absorben CO2.En varias partes del mundo, algunos ya han dejado de ser los sumideros y se han convertido en fuentes de este gas.
Ante esto, el Secretario General de la OMM, Petteri Taalas, advirtió que los datos muestran que “vamos en la dirección equivocada” e hizo un llamado a adoptar “medidas urgentes”.
Subrayó que las emisiones de CO2 son la causa principal del cambio climático y repercutirá en la atmósfera “durante miles de años”, provocando la pérdida de hielo polar, el calentamiento de los océanos y el aumento de nivel del mar.
“Tenemos que transformar nuestros sistemas industriales, energéticos y de transporte, y todo nuestro estilo de vida. Los cambios que deben aplicarse son asequibles desde el punto de vista económico y viables en el plano técnico. El tiempo se agota”, concluyó.
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