Mientras que en el norte del país la pobreza extrema es muy baja, en el sur se ha agudizado el rezago social a lo largo de los últimos 10 años, a pesar de los diversos programas sociales, explicó Agustín Escobar de Coneval.
En México, la brecha nacional entre ricos y pobres se agudiza entre los extremos geográficos del país. Mientras que en los estados de la frontera norte como Coahuila y Nuevo León, la pobreza se ha reducido sustancialmente durante los últimos 10 años, en los estados del sur como Chiapas, Guerrero, Oaxaca y Veracruz, se mantiene o se agudiza el rezago social.
Así lo informó el Agustín Escobar Latapí, consejero académico del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en entrevista para Aristegui en Vivo.
“(En los estados del sur) porcentajes muy altos de población siguen en pobreza. Estamos hablando de dos tercios de la población o más viven en pobreza, y una tercera parte de la población en pobreza extrema. Hay niveles de 10 veces más pobreza extrema, en términos porcentuales, en estos estados del sureste que en los estados del norte. Realmente la brecha nacional es muy grande”.
Escobar destacó el desarrollo que han presentado estados del centro-occidente del país, empezando por Querétaro, que han visto una reducción de la pobreza de manera sustancial.
“Creemos que esto tiene que ver con la mano de obra empleada para la exportación, tanto manufacturera como la exportación agrícola”.
El lunes el Coneval presentó los resultados de la medición de la pobreza en la década que abarca del 2008 al 2018. Para Escobar, la noticia más importante es la reducción de la pobreza extrema de cuatro puntos porcentuales, que equivale a 3 millones de personas.
Sin embargo, “el principal mensaje es que lo demás no cambia mucho”, consideró el consejero académico. “Más bien se trata de un panorama en el cual la pobreza permanece sin grandes cambios, aunque somos capaces de conocer donde cambia, donde no, y en qué aspectos hay que trabajar”.
“Con esta información podemos decir en qué estados está el problema de manera más seria, entre qué grupos de población se encuentra el problema, y a qué dimensiones de la pobreza corresponde, ya sea por ingresos, seguridad social, seguridad de la vivienda, salud, o educación, ya que la medición es multidimensional, eso significa que la política pública puede enfocarse en cada lugar a lo que hace falta”.
El consejero detectó dos retos fundamentales para disminuir el rezago social de los mexicanos: mejorar el ingreso de los trabajadores, y ampliar el acceso a la seguridad social, ya que más de la mitad de los trabajadores no cuentan con ella, pues se encuentra “totalmente estancada en México”.