Eric Olhats pasará a la historia por ser quien descubrió, trajo a la Real y alojó en su casa de Baiona a Griezmann, pero hay otro talento que él quiso que se desarrollara en Donostia que apunta muy alto y se ha ganado el corazón de los txuri urdin. Es Robin Le Normand, que ha experimentado una gran eclosión este año y que, según confirma en MD, ya tiene sobre su mesa una oferta de renovación de su contrato, que expira en 2022.
¿Le extraña que Le Normand esté ofreciendo este nivel?
Lo primero que quiero hacer es saludar a través de Mundo Deportivo a toda la gente que conozco de la Real. Quiero darles mi amistad. En este momento, el fútbol es secundario, pero esperamos pronto ver partidos. Les mando un abrazo. La vida sigue y sobre Robin, sabía que podía dar este nivel, pero no tan pronto. No soy mago y no esperaba que este año, el primero en el primer equipo, pudiera hacer lo que está haciendo y además como central izquierdo. Estoy sorprendido, sí.
¿Cómo valora la temporada que está haciendo?
Para mí, es estupenda. Hizo la pretemporada sin saber muy bien si iba a ser elegido, se metió en la plantilla y poco a poco ha ido convenciendo. No ha fallado casi nunca. Y por eso es titular en la Real.
¿Le ve consolidado?
Sí, sí. Ahora es un jugador consolidado. Fue importante lo que hizo el año pasado en esos primeros partidos. Ahí, si te equivocas, puedes desaparecer. Y causó ya una gran impresión. Ya tenía 22 años y no tenía posibilidad de fallar. Lo hizo estupendamente. También era importante saber cómo reaccionaba ante los grandes, contra el Madrid y el Barcelona, para ver su nivel. Y dio el nivel, aparte de la anécdota del penalti, sobre la que podíamos discutir muchos años, aunque no lo fue, punto final. También pasó esa prueba de fuego.
¿Es el mismo jugador que trajo hace unos años? Usted le veía potencial…
No soy malo viendo la potencialidad de un jugador. Pero también hay que encontrar un lugar que le convenga. No estoy seguro de que otros jugadores que yo traje como Griezmann, Sio, Cadamuro o Le Normand habrían salido en otro club que no fuera la Real. La mentalidad de la Real es peculiar, familiar, con una filosofía que conviene a este tipo de jugadores. Vi una potencialidad en Robin y cuando le metí en la Real, con la bendición del director deportivo de la época, otros se encargaron de él, sobre todo Imanol. Con mucha dureza, pero también con humanidad y competencia, le ayudaron a cambiar su forma de jugar.
¿A qué se refiere?
En Francia existe la filosofía de jugar para no perder. En España es jugar para ganar. Esto lo cambia todo en el aspecto del juego. Él fue capaz de hacerlo y no ha hecho más que crecer. Un día fallará. Seguro. Pero su techo yo no lo veo todavía. Sólo tiene 23 años, con experiencia, confianza y madurez, puede ser muy, muy bueno.
¿La selección de Francia es una posibilidad?
Él me considera su consejero, nada contractual. Es verdad que he hablado con Deschamps de él. Deschamps le conoce, ha oído hablar de él. Si sigue así, obligatoriamente, tendrá que ser convocado para una concentración con Francia. Lo espero de corazón. No sé si éste es el día, pero lo va a merecer y va a llamar a esa puerta.
¿Está en el club ideal para él?
Sí, está en su club ideal, que es la Real. Tiene una mentalidad adecuada, que se ajusta a la de la Real y a la de Donostia. Está muy bien en la Real y te puedo decir que empezamos a hablar de la renovación. Estamos en el buen camino.
¿Ya ha ofrecido algo la Real?
Estamos en el buen camino. Ellos quieren que él siga, el chico quiere seguir. Hay clubs que me han preguntado por él, pero estoy de acuerdo con Robin en que si puede seguir en la Real, seguirá en la Real. Me extrañará mucho si su renovación no se hace pronto.
¿Son de varias ligas esos clubs que se han interesado por él?
Yo conozco mucha gente en el fútbol y hay clubs de Francia que me preguntaron por él y que vinieron a verle. Jugando tantos partidos en la Real, que está tan bien clasificada en la Liga, la gente le descubre y quiere saber quién es él. Hay clubs de Europa que se han interesado: Francia, Italia, Alemania y Rusia. Algunos han venido a verle dos o tres veces y les ha gustado.
Usted le conoce, ¿cómo es? No parece nada divo.
Viene de una familia humilde y siempre ha sido así: muy humilde. Sabe perfectamente de dónde viene. Sabe por lo que ha pasado. No voy a hablar de milagro, porque se lo ha ganado. Es un chico tranquilo, bordeando la excesiva timidez, pero con la cabeza bien amueblada. Para mí es un ejemplo.
La muestra es que vive en un piso en Astigarraga.
Sí, con el dinero que él había ganado. Viene de su educación. Es inteligente, un tipo del que te puedes fiar. No sé si la gente se da cuenta del trabajo que ha hecho en la Real. Jugó mucho en el Sanse. No era titular, lo era Ugarte. Se ganó el sitio con voluntad y trabajando todos los días.
¿Cómo ve a Näis? También lo trajo usted.
Näis fue el primer jugador que se firmó en la ‘Era Olabe’, cuando yo lo traje de Saint Etienne. Fue una muestra de total confianza. Es un talento puro; pero debe ganar en madurez y ser capaz de jugar pensando más en el colectivo en ciertas zonas del campo. Debe tener paciencia. Puede ser que no entienda que no tenga más opciones arriba, pero debe entender que la plantilla está a tope. El club cree en él y tiene que esperar a progresar dentro del club. Sé que tienen confianza en él y pronto va a tener su oportunidad.
Kevin también es cosecha propia.
Kevin ha vivido un periodo muy duro. Pero está haciendo una temporada estupenda en el Leganés, dentro de una situación difícil. Juega de medio ahora y seguramente va a volver a la Real. Estoy seguro de que tiene nivel de Primera y ahora también estoy convencido de que pueda amoldarse a otra forma de jugar, con ímpetu, lucha e intensidad. Chapeau por él porque, estando en el Leganés y en descenso, no se dejó, luchó, luchó y luchó para convencer. Y a mí me ha convencido. Tiene nivel de Primera y para jugar en la Real.
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