Tras el fallecimiento de 44 internos en el Centro de Rehabilitación Social Bellavista, en Santo Domingo, Ecuador, la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos externó su profunda preocupación por la constante violencia en las cárceles del país, donde han fallecido cerca de 400 reos en menos de dos años.
Liz Throssell, representante de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, declaró citando a fuentes policiales que los disturbios se produjeron durante el traslado de un preso conocido como “Anchundia”, vinculado a la banda R7, que permanecía recluido en la cárcel de La Roca, en el suroeste del país, y fue trasladado a la de Santo Domingo.
“Estos acontecimientos no son aislados“, resaltó la ONU pues citó otros enfrentamientos como el registrado, el pasado 25 de abril, en la cárcel de El Inca, en Quito, que acabó con 15 heridos; así como los disturbios en el centro penitenciario de Esmeraldas, en la costa norte, con un saldo de 12 reclusos lesionados.
Michelle Bachelet, Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, destaca que estos “preocupantes incidentes” evidencian de nuevo “la urgente necesidad de una reforma integral del ordenamiento jurídico penal“.
La expresidenta de Chile recordó que la seguridad de todas las personas bajo custodia recae en el Estado y que estas muertes le generan una presunción de responsabilidad, por lo que pidió una investigación completa de los incidentes.
Asimismo, Amnistía Internacional indica que “las autoridades deben atender causas estructurales como hacinamiento, corrupción e impunidad a través de una política centrada en los Derechos Humanos”.
Estar privado de la libertad en #Ecuador se ha convertido casi en sentencia de muerte. Tras nueva masacre carcelaria, las autoridades deben atender causas estructurales como hacinamiento, corrupción e impunidad a través de una política centrada en #DDHH ⬇️https://t.co/yoKQHWze0B
— Amnistía Internacional Américas (@AmnistiaOnline) May 10, 2022
Por último, la ONU pide que las autoridades ecuatorianas “examinen detenidamente” las recomendaciones del Informe de 2019 de la Alta Comisionada y la hoja ruta propuesta por la Oficina de Derechos Humanos de la ONU y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, con el objetivo de reducir la violencia, las muertes y las lesiones en las instalaciones de detención.
De acuerdo con Amnistía y la ONU, desde diciembre de 2020 y hasta mayo de 2022 se han producido al menos 390 asesinatos en las cárceles de Ecuador.