El pleito entre Twitter y Elon Musk ya llegó a los tribunales y este martes la compañía comenzó a exponer su caso, para que haya un juicio en septiembre sobre su demanda, que busca que Elon Musk mantenga su oferta de adquisición de 44,000 millones de dólares, y argumentó que la incertidumbre causada por el intento del empresario de retirarla está dañando a la compañía.
“La continua incertidumbre inflige daño a Twitter cada hora de cada día”, dijo William Savitt, un abogado de Twitter TWTR.N, en la audiencia remota, porque la jueza Kathaleen McCormick dio positivo el lunes por COVID-19.
La compañía, que tiene su sede en San Francisco, busca resolver meses de incertidumbre para su negocio, y Musk intenta salirse del acuerdo por lo que dice que son cuentas de “spam” de Twitter que, según él, alteran su valor.
Twitter ha pedido a McCormick que declare que Musk ha incumplido el acuerdo y que le ordene completar la fusión al precio acordado de 54.20 dólares por acción.
La red social quiere un juicio acelerado en septiembre porque dijo que Musk está desprestigiando a la compañía y socavando las operaciones al negarse a aprobar iniciativas empresariales, como un plan de retención de empleados.
La empresa dijo que la adopción de la propuesta de Musk de “caminar lento” para un juicio en 2023 deja poco tiempo para el litigio adicional sobre la financiación de la compra si al multimillonario se le ordena cerrar la compra, pues el acuerdo financiero vence en abril.
Musk acusó el viernes a Twitter de buscar un juicio a “velocidad de la luz” para “encarrilar” la compra de la compañía.
Desde que acordó en abril la compra de Twitter, Musk ha cuestionado si la compañía engañó a los reguladores sobre las cuentas falsas y los bots y ha propuesto un juicio en febrero para tener tiempo adecuado para investigar.
Las acciones de Twitter se han desplomado desde más de 50 dólares cuando se anunció el acuerdo a un mínimo de 32.55 dólares la semana pasada.
El martes cotizaban con un alza del 2% a 39.16 dólares.
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