Una escapada a Francia en tren, el transporte más sostenible y cómodo ya que llega al centro de la ciudad, es una gran propuesta para este verano. El tren de alta velocidad Renfe-SNCF en cooperación une España con 13 ciudades francesas, entre ellas Marsella con Madrid (en 8h) y con Barcelona (5h).
La capital de la Provenza es un destino que merece la pena visitar. Un paseo por el Puerto Viejo recuperado para los peatones, la ombriere de Norman Foster, el complejo del MuCem, un paseo por el antiguo barrio Le Panier, barrio hipster y de artistas, una visita a Nuestra Señora de la Guardia con panorámica 360º de la ciudad, probar su plato típico, la sopa ‘bullabesa’ en un local familiar como Chez Madie-Les Galinetes al lado del puerto, o comprar el famoso jabón de Marsella.
La Playa de los Catalanes (Plage des catalans) es la más accesible cuando uno está en el centro de Marsella. Pequeña pero bonita, es habitual ver a gente jugando al voley. En las plazas Thiars o Aux Huiles podrá encontrar un gran ambiente nocturno. Terrazas de restaurantes o bares de copas con música en directo cualquier día de la semana. Una ciudad que merece una escapada