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Escrivá plantea suprimir la prestación extraordinaria por cese de actividad para los autónomos a partir de octubre

Una agencia de Viajes Halcón cerrada por la covid-19, en Madrid.
Una agencia de Viajes Halcón cerrada por la covid-19, en Madrid.Ramón Muñoz

La prestación extraordinaria por cese de actividad para los autónomos no seguirá vigente más allá del 30 de septiembre. Esa es la voluntad del Gobierno y así se lo han transmitido representantes del Ministerio de Seguridad Social a las organizaciones representativas de los trabajadores por cuenta propia durante la reunión que han mantenido este miércoles. El progresivo levantamiento de las restricciones a partir de la mejora de situación pandémica ha permitido la recuperación de la actividad en sectores muy penalizados como la hostelería o el comercio, y por ello, desde el Gobierno consideran que es el momento de ir cerrando poco a poco el paraguas.

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Sin embargo, la propuesta se ha topado con el rechazo del colectivo de organizaciones que asistieron al encuentro, que se presentaban con la petición conjunta de que no solo se siguiera prorrogando para lo que queda de año el esquema de las prestaciones extraordinarias por cese de actividad, sino que se extendiera hasta el 31 de enero de 2022. “Hemos trasladado al Gobierno que no aceptamos su propuesta de suprimir la prestación extraordinaria desde octubre. Dejaría sin prestación al 80% de los 226.000 que hoy la cobran. Seguimos negociando”, ha publicado en redes sociales Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA).

“Siendo conscientes del enorme esfuerzo presupuestario que hay detrás de estas prestaciones, también sabemos que se han demostrado como la mejor inversión para que el tejido productivo aguante y pueda encarar su reactivación”, señalan desde la Unión de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE). Por ello han trasladado al equipo de Escrivá que “reconsidere cualquier tentativa de recortar la protección para quien sigue necesitándola”.

Según los datos publicados este miércoles por ATA, 280.000 autónomos cobran en estos momentos la prestación extraordinaria, lo que representa el 8,6% de los 3.262.255 trabajadores que componen el colectivo. Tal y como se concluye en el barómetro de ATA, el 34,2% de los autónomos que está cobrando actualmente la prestación por cese de actividad afirma que se darán de baja como autónomos cuando se ponga fin a esta ayuda, es decir, unos 75.000 autónomos.

Un gran esfuerzo

“Es necesario que esta modalidad de cese de actividad se amplíe en los mismos términos que el anterior, ya que existen sectores de actividad como las agencias de viajes, los guías turísticos, las actividades culturales, musicales o los profesionales de los espectáculos de feria entre otros, que aún sufren el impacto económico derivado de la pandemia”, ha defendido, por su parte, Eduardo Abad, presidente de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA).

En esta línea, también ha exigido el mantenimiento “del mayor sistema protector frente a la crisis económica derivada de la covid-19 para los autónomos” hasta el 31 de enero de 2022. “Nos consta que el ministerio ha realizado un gran esfuerzo y le solicitamos que continúe en esa línea de acción, ya que estas medidas han servido para que nuestro colectivo pueda mantener sus actividades”, ha añadido Abad.

Desde la irrupción de la pandemia y tras la firma de la quinta prórroga de las ayudas, podían optar a la prestación extraordinaria aquellos trabajadores autónomos cuyas actividades hubieran quedado suspendidas por la declaración del estado de alarma, o en el caso de que acreditasen en el segundo y tercer trimestre del 2021 unos ingresos inferiores a los habidos en el primer trimestre del 2020.




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