Adelfo Regino, director del INPI, afirmó que el escritor Arturo Pérez Reverte debe tener una actitud de respeto, porque lo que se busca es la reconciliación entre dos pueblos hermanos; mientras que Alejandro Rosas dijo que las dos naciones ya pasaron por ese proceso.
Adelfo Regino, director del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), afirmó que el escritor español Arturo Pérez Reverte debe asumir una actitud respetuosa y responsable ante la solicitud de disculpas del presidente Andrés Manuel López Obrador al rey Felipe VI de España, porque está planteado una revisión a nuestra historia y raíces para buscar una verdadera reconciliación.
Este lunes, el escritor publicó un tuit en el que afirma que: “Si este individuo (AMLO) se cree de verdad lo que dice, es un imbécil. Si no se lo cree, es un sinvergüenza“, luego de que se diera a conocer la existencia de las cartas enviadas por López Obrador al rey Felipe y al papa Francisco para que pidan perdón a los pueblos originarios mexicanos por los agravios cometidos durante la Conquista.
El titular del INPI afirmó que está documentado el proceso de colonialismo y exterminio que ejercieron los españoles sobre los pueblos originarios, lo cual se refleja en lo doloroso que es reconocer la existencia de culturas repartidas por todas partes del país.
Regino dijo que las disculpas no solo deben venir de España o el Vaticano, sino también del Estado mexicano que ejerció un colonialismo interno al someter a los pueblos indígenas o condenarlos a vivir en escenarios de pobreza y exclusión.
Negó que se trate de un acto de distracción por parte del Presidente de la República, porque el propio López Obrador está convencido de la importancia que tienen los pueblos en la vida pública. Recordó que el Ejecutivo federal se desempeñó como titular del Centro Coordinador Indigenista en Tabasco, por lo que conoce las circunstancias que rodean este debate.
Dijo que lamenta las palabras del escritor español Arturo Pérez Reverte y que debería asumir una postura actitud respetuosa y responsable ante la solicitud de López Obrador, porque son de buena fe y buscan la reconciliación entre dos pueblos hermanos.
Sobre el tuit del escritor, Adelfo Regino respondió que a muchos les cuesta aceptar la historia que hemos vivido como humanidad, como el genocidio, las atrocidades, la falta de respeto a los derechos humanos que se registraron en estas tierras hace 500 años.
LA HERIDA ABIERTA
El historiador Alejandro Rosas dijo que es positivo el debate que se abre con la carta, el cual se negó con otros presidentes, pero sostuvo que se debe perder la visión maniquea de la historia en la que se considera que la Conquista y el virreinato fueron exclusivamente malos.
Sostuvo que no hay un proceso de reflexión sobre las migraciones y los procesos sociales que ayudaron a construir la nación que actualmente es México, porque se considera de manera general que el Virreinato fue una etapa muy oscura que se caracterizó por el saqueo de recursos.
Dijo en México se han interrumpido las discusiones para definir los aspectos positivos que dejaron personajes como Hernán Cortés, porque permanece una historia oficial creada por el sistema político del siglo XX que indica que los españoles sólo trajeron enfermedades y corrupción.
Alejandro Rosas afirmó que España se reconcilió con México en 1861 al no querer apoyar la triple alianza con Francia e Inglaterra que planteaba la invasión del territorio nacional para obligar al gobierno de Benito Juárez al pago de la deuda. Mientras que México se reencuentra con España a través de la recepción de los refugiados de la dictadura de Francisco Franco.
Recordó que los españoles se aliaron con pueblos que estaban sometidos por los aztecas, por lo que también fueron responsables de los excesos cometidos en la invasión.
El historiador indicó que el debate de las disculpas debe estar precedido por un diálogo interno sobre “los traidores tlaxcaletecas” y “la traidora Malinche”, conceptos muy arraigados que se construyeron bajo el regimen priista como historia oficial.
El historiador Alejandro Rosas dijo que la población mexicana es resultado de la fusión entre españoles, pueblos originarios y distintas migraciones, por lo que no se puede afirmar que la actual generación sea línea directa de las culturas prehispánicas y por lo tanto agraviada directa de la Conquista.
Al igual que Adelfo Regino descartó que se trate de una cortina de humo para distraer de otros temas, pero sostuvo que no era el mejor momento para dar a conocer esta carta.