SAN SALVADOR — Al menos nueve fallecidos y decenas de lesionados dejó el sábado una estampida de aficionados durante el partido de vuelta de cuartos de final entre Alianza y FAS de la primera división del fútbol salvadoreño.
“Estamos agilizando la entrada y salida de ambulancias al Estadio Cuscatlán (en la capital salvadoreña).
Pedimos a la población apartarse y permitir el paso de las ambulancias”, exhortó la Policía Nacional Civil (PNC) en un tuit.
Los fallecidos ascienden a nueve y hay varios lesionados que “están siendo trasladados hacia los hospitales cercanos, al menos dos de ellos en condición crítica”, agregó.
“Conjuntamente con la Fiscalía General de la República (FGR) vamos a investigar hasta los últimos detalles… Vamos a investigar desde la venta de boletería, los ingresos al estadio, pero especialmente de la zona sur; dónde y por qué sólo se abrió un portón, vamos a investigar esas responsabilidades penales”, prometió ante los periodistas el director general de la PNC, comisionado Mauricio Arriza Chicas, que llegó a coordinar las acciones de ayuda.
Por su parte el presidente salvadoreño Nayib Bukele advirtió en su cuenta oficial de Twitter que se realizará una investigación exhaustiva y que lo ocurrido en el estadio Cuscatlán no quedará en la impunidad.
“La PNC y la FGR realizarán una investigación exhaustiva de los hechos ocurridos en el Estadio Cuscatlán. Todos serán investigados: equipos, directivos, estadio, boletería, liga, federación, etc. Sean quienes sean los culpables, no quedarán en la impunidad”.
Por su parte el ministro de Gobernación y presidente de la Comisión Nacional de Protección Civil, Juan Carlos Bidegain, dijo en conferencia de prensa que, “aficionados han mostrado que les vendieron boletos falsos y les permitieron la entrada. Otros hablan de que hubo sobreventa al mercado negro. Como haya sucedido, el presidente Bukele ha ordenado una investigación exhaustiva para que nada quede impune”.
La tragedia tuvo lugar en un espacio para ferias en Quetzaltenango.
La Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) manifestó en un comunicado que lamentaba lo sucedido y que se solidariza con las familias de los fallecidos.
El encuentro fue suspendido debido al incidente a los 16 minutos del primer tiempo y con el marcador 0-0. No se ha informado cuándo será reanudado.
El ente rector del fútbol salvadoreño también informó que debido a la tragedia ocurrida en el estadio Cuscatlán, suspendía los partidos en todas las categorías del fútbol profesional, programados para el domingo 21 de mayo.
La televisión local transmitió imágenes en vivo de la estampida de aficionados de los “albos” de Alianza que derribaron el portón del sector general y decenas alcanzaron el terreno de juego donde fueron atendidos por los cuerpos de socorro.
“Fue una avalancha de los aficionados que tiraron el portón, algunos quedaron bajo los hierros en el túnel, otros lograron llegar hasta el graderío y después a la cancha y estaban asfixiándose”, dijo a los periodistas uno de los voluntarios de los Comandos de Salvamento.
“Esta es una noche oscura, podemos confirmar nueve fallecidos, siete hombres y dos mujeres y atendimos más de 500 personas y a más de 100 las trasladamos a los hospitales, algunos de ellos estaban graves”, dijo el vocero de los Comandos de Salvamento, Carlos Fuentes.
El presidente de la Primera División de Fútbol de El Salvador, Pedro Hernández, dijo que le información que han recibido es que “aparentemente fue por un portón que lo tumbaron y donde la gente pues en estampida golpeó a los demás”.
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