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Estás haciendo esto con la bayeta de la cocina y es muy peligroso

La bayeta de cocina es uno de los elementos más utilizados en esta estancia del hogar, aunque muy pocas personas son realmente conscientes del peligro que supone en determinadas circunstancias. Según datos de un análisis realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), apenas el 24% de las personas limpian y desinfectan la bayeta una vez a la semana.

¡Mucho cuidado con la bayeta de cocina!

Aunque parezca una cuestión sin importancia, lo cierto es que si la bayeta no está limpia y desinfectada, extenderemos las bacterias y microorganismos por todas las superficies. Por lo tanto, si limpiamos algo con la bayeta, puede ser el peor remedio que la enfermedad.

Utilizamos la bayeta para retirar restos de comida de la encimera de la cocina, así que parte de esos restos quedan atrapados en la estructura, y sirven como fuente de nutrientes a un gran número de microorganismos. En ella encuentran las condiciones idóneas para reproducirse, ya que, además de los nutrientes, tiene un alto grado de humedad.

Por este motivo, es fundamental lavarla cada dos o tres días para que no prolifere el moho. Por lo general, solemos hacerlo cuando está «babosa», pero ya es demasiado tarde. Esta textura resbaladiza que adquiere la bayeta de cocina con el tiempo no es grasa sino biofilm, una capa que las colonias de bacterias desarrollan para protegerse.

Por lo tanto, llegado este punto, la bayeta tiene millones de bacterias que pueden poner en serio riesgo nuestra salud. Un estudio publicado en la revista ‘Nature’ calculó que en apenas un centímetro cúbico hay 54.000 millones de bacterias, algunas de las cuales pueden ser patógenas y causar diferentes enfermedades. Cabe señalar que el 40% de los brotes alimentarios que se registran en la Unión Europea tienen lugar en el entorno doméstico.

¿Cómo eliminar el biofilm?

No existe una fórmula mágica ni un desinfectante que pueda hacer desaparecer el biofilm de la bayeta de cocina. Una vez tiene una textura resbaladiza, lo mejor que podemos hacer es tirarla. Lo más importante para combatir el biofilm es prevenir su formación. Para ello, debemos eliminar los restos de comida y suciedad después de cada uso.

Además, dos veces por semana debemos ponerla a remojo durante cinco minutos en una mezcla de un litro de agua y 100 mililitros de lejía. Una vez transcurrido el tiempo, aclaramos con abundante agua y dejamos secar al aire. Lo ideal es cambiar la bayeta cada dos semanas.


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