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Estas son las consecuencias de llevarte el móvil a la playa

Estas son las consecuencias de llevarte el móvil a la playa

La semana pasada, nuestro país atravesaba una ola de calor que ha dejado temperaturas altas en gran parte de la península. Dichas temperaturas han provocado que gran parte de la población se desplace con el objetivo de refrescarse, ya sea en playas o en piscinas. Muchos aprovechan su tiempo libre para tomar el sol y nadar un rato, ambas actividades populares en España.

Cuando visitamos la playa o la piscina hay varios objetos que solemos llevar con nosotros: la toalla, crema solar para protegernos del sol, agua para mantenernos hidratados y el teléfono móvil. A pesar de no ser estrictamente necesario, la mayoría decide llevar a la playa este dispositivo que ha pasado a ser indispensable en nuestras vidas.

El sobrecalentamiento, un enemigo para los dispositivos electrónicos

Aún así, debe tenerse en cuenta que las altas temperaturas no le sientan bien a ningún aparato electrónico, ni siquiera aquellos que solemos llevar siempre con nosotros como los smartphones. Durante el verano, suelen darse muchos casos de sobrecalentamiento de los teléfonos, algo que puede ser perjudicial para sus baterías y, por lo tanto, para su vida útil.

Al tomar el sol en la playa, muchas personas acostumbran a tener el smartphone al lado, por lo que los móviles terminan estando expuestos a los rayos de forma directa. Además de afectar en el rendimiento del dispositivo, el calor puede ablandar el pegamento que une las distintas ‘capas’ de las que está compuesto y puede perjudicar a las pantallas de cristal líquido.

Claves para proteger el móvil de los rayos del sol

Si aún así sigues llevando tu teléfono a la playa porque no te queda otra, a continuación te dejamos unas recomendaciones para evitar las consecuencias mencionadas anteriormente.

  • Pon tu teléfono móvil bajo una sombrilla para evitar que le dé la luz directa del sol. También puedes guardarlo dentro de tu bolso o mochila.

  • Trata de mantenerlo apagado en la medida de lo posible.
  • No uses apps que hagan trabajar mucho a la CPU o al GPS.

Otro elemento que puede afectar a tu smartphone es el agua de la playa (o la piscina), que puede ser un gran enemigo para estos dispositivos. Aunque muchos teléfonos actuales cuentan con una buena certificación de resistencia al agua y al polvo, no todos disponen de esta ventaja. Antes de correr el riesgo de que le entre agua o polvo a la terminal, asegúrate de que tu móvil puede soportarlo.




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