Existen muchísimos mitos sobre la alimentación, sobre todo en lo que se refiere a la pérdida de peso. Se dice que hay determinados alimentos que ayudan a adelgazar, mientras que otros tienen el efecto contrario.
En realidad, no existe ningún alimento que por sí solo ayude a alcanzar un determinado objetivo. Ahora bien, cuando se incluye en el marco de un estilo de vida saludable, sí puede resultar un gran aliado.
Aquí entran en juego los conocidos como superalimentos, con un alto contenido en vitaminas, ácidos grasos, antioxidantes y fibra. Tienen un gran número de beneficios para la salud y reducen el riesgo de desarrollar enfermedades.
En concreto, hay un alimento que todo el mundo pensaba que no debía formar parte de una dieta para adelgazar, y resulta que es fantástico para decir adiós a esos kilos de más de una vez por todas.
Se trata del kvarg, un queso batido, de aroma fresco, sabor ligeramente ácido y textura untuosa que se elabora con leche de vaca. Es originario de la gastronomía de los países escandinavos.
Destaca por tener un mayor nivel de proteínas de alto valor biológico que otros lácteos. Además, el kvarg es rico en fosfato y calcio y bajo en azúcar y grasa. Los nutricionistas señalan que es el sustituto perfecto del yogur tradicional.
Beneficios del kvarg para la salud
Al ser un producto lácteo rico en proteínas, está muy recomendado para quienes hacen ejercicio, ya que estas se encargan de la reparación de los tejidos y el mantenimiento de la musculatura. A esto hay que sumar que el kvarg tiene un alto poder saciante y, por lo tanto, ayuda a controlar el apetito.
Al igual que la gran mayoría de lácteos, contiene vitaminas del grupo B, que refuerzan el sistema inmunológico y favorecen el proceso mediante el cual el cuerpo obtiene energía de los alimentos ingeridos. También ayuda a fortalecer los huesos al ser una fuente rica en calcio.
Una de las principales diferencias del kvarg con respecto al resto de lácteos, es que este contiene muy poca sal. Teniendo esto en cuenta, es un alimento apto para personas que tengan la presión alta o quieran controlar su ingesta en sodio.
Y, por último, cabe señalar que el kvarg es muy versátil en la cocina. Se puede tomar como snack acompañado de frutos rojos o frutos secos, untar en una tostada, utilizar para preparar rellenos y salsas, etc.
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