Si piensas que quizá te pasas un poco con la cafeína, igual debes reducir su cantidad. Que si los cafés, las bebidas gaseosas, un estimulante que no es tan bueno para la salud. Mira los efectos de la cafeína en el cerebro (los hay un poco positivos).
La cafeína es estructuralmente similar a la adenosina, así que impide que tengamos sueño y nos estimula para mantenernos despiertos.
Aumenta el estado de alerta
La cafeína es un estimulante del sistema nervioso central (SNC) que aumenta el estado de alerta especialmente en el momento en el que hemos descansado menos y tenemos sueño.
Menos riesgo de depresión
Deben hacerse más estudios para esta afirmación pero algunos informes concluyeron la relación entre el consumo de cafeína y un menor riesgo de depresión, sobre todo cuando tomamos café.
Estimula la memoria
No solamente nos pone en alerta sino que también estimula la memoria pues en diferentes estudios se ha demostrado que las personas que toman cafeína recuerdan más diversos tipos de informaciones.
Ansiedad y nervios
Si bien puede tener algunos efectos positivos en el cerebro, hay otros que no lo son tanto. Se ha demostrado que como estimulante, la cafeína provoca ansiedad y nervios y esto se traduce en un estado algo complicado si nos pasamos.
Alteración el ritmo cardiaco
A consecuencia del estado de alerta que supone beber cafeína, alteramos el ritmo cardíaco que va a mayor velocidad y se agita la respiración. Son los efectos de la cafeína.
Irritabilidad
Cuando nos pasamos con esta sustancia entonces se dan estados de irritabilidad importantes. Nos encontramos más alterados de lo normal y podemos llegar a descontrolarnos más fácilmente.
Insomnio
Si todavía estamos tomando cafeína a cierta hora, es posible que tengamos insomnio. Y esto pasa por no dormir adecuadamente, tener sueño durante el día, volver a tomar cafeína y así sucesivamente.