La senadora californiana se suma a una lista de varios nombres, como Elizabeth Warren o Julian Castro, para derrotar a Donald Trump.
La senadora demócrata y exfiscal general de California, Kamala Harris, anunció este lunes su intención de presentarse como candidata a las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2020.
A casi dos años de la batalla para derrotar a Donald Trump, Harris, de 54 años, se suma a otras figuras del partido demócrata entre los que destacan Elizabeth Warren, senadora por Massachusetts; Kirsten Gillibrand, por Nueva York; la congresista Tulsi Gabbard de Hawái; o Julian Castro, exalcalde de San Antonio (Texas) y exsecretario de vivienda en el gobierno de Barack Obama.
Segunda mujer de raza negra en ser elegida para el Senado de Estados Unidos, la abogada escogió un día simbólico para comunicar su candidatura, la festividad de Martin Luther King. Durante su intervención en el programa televisivo de la cadena ABC, Good Morning America, dijo:
“El público estadounidense quiere a un luchador y quieren a alguien que luche como los demonios por ellos y no por el interés propio. Estoy preparada para hacerlo“, aseguró la demócrata.
“Verdad, justicia, decencia, equidad, libertad, democracia, no son solo palabras son los valores que amamos como estadounidenses”, afirmó Harris al hacer el anuncio en sus redes sociales. “Competiré por la presidencia”, escribió.
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— Kamala Harris (@KamalaHarris) 21 de enero de 2019
Kamala Harris creció en Oakland, California, estado tradicionalmente demócrata y claro oponente a las políticas de Trump. Es hija de inmigrantes, madre de India y padre de Jamaica.
Durante la entrevista contó que se identifica con el líder de los derechos civiles por sus ideas y porque sus padres la llevaban junto con su hermana a los mítines que Luther King dirigió.
Dentro de su partido es considerada como progresista, pero su discurso dista del marcado tono izquierdista de la que ya es una rival, la senadora Warren, con sus frecuentes ataques a la corrupción y a Wall Street.
En esa esfera ideológica sí se encuentra el senador por Vermont, Bernie Sanders, que perdió contra Hillary Clinton las primarias por la candidatura demócrata en las presidenciales de 2016 pero no descarta volver a presentarse.
Durante las audiencias en el Senado ha ganado reconocimiento por sus fuertes cuestionamientos en las audiencias de confirmación a nominados de Trump.
Su equipo de campaña tendrá base en Baltimore, con una segunda oficina en Oakland, informaron sus ayudantes al sitio electrónico Politico.
Entre los miembros de su campaña, están un grupo de consejeros que también trabajaron para el exgobernador de California, Jerry Brown. Su supervisor de encuestas será David Binder, que trabajó para la campaña de Barack Obama. También será acompañada su esposo Doug Emhoff, quien es abogado.
Además, su hermana, Maya Harris, quien fue consejera política para Hillary Clinton en 2016, y su cuñado, Tony West, el tercer funcionario más importante del Departamento de Justicia durante la presidencia de Obama.
(Con información de NTX)