La SRE reiteró, a través de un comunicado, que se trata de una medida unilateral con la que México no está de acuerdo y precisó que el programa conocido como “Quédate en México” fue admitido “de manera temporal y por razones humanitarias”.
La Casa Blanca aseguró este martes que el programa de devolución de solicitantes de asilo de terceros países a México fue “extensamente negociado con el gobierno mexicano”; sin embargo, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador negó la existencia de negociaciones previas con Washington.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) reiteró a través de un comunicado que se trata de una medida unilateral con la que México no está de acuerdo y precisó que el programa conocido como “Quédate en México” fue admitido “de manera temporal y por razones humanitarias”.
Ayer un juez de California determinó que este plan podría violar la Ley de Procedimientos Administrativos, por lo que resolvió suspender su aplicación a partir del próximo viernes 12 de abril.
“Una Corte de Distrito en California ha emitido una suspensión temporal a nivel nacional deteniendo el uso de la Ley federal como parte de un programa de cooperación extensamente negociado con el gobierno de México”, señaló la Casa Blanca en un comunicado en respuesta al fallo de la Corte federal contra el programa.
Invocando la Ley de Inmigración y Nacionalidad de 1952, el Departamento de Seguridad Interna de EU anunció el 20 de diciembre que iniciaría la devolución a territorio mexicano de solicitantes de asilo para evitar que esperaran su proceso en territorio estadounidense.
Migrantes centroamericanos esperan su audiencia en la corte para solicitantes de asilo en EU en un refugio temporal de Ciudad Juárez, México, como parte de la política establecida por el gobierno estadounidense (Foto: REUTERS/Jose Luis Gonzalez)
La Casa Blanca sostuvo que esa acción “socava gravemente la posibilidad para el presidente de atender la crisis en la frontera con las herramientas que autorizó el Congreso, e interrumpe la conducta de nuestra política exterior”. Asimismo, anunció que apelará la sentencia.
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El gobierno mexicano respondió que, siendo “respetuoso de los asuntos domésticos” de Estados Unidos, “tomó nota” de la suspensión del programa sobre la devolución de ciertos extranjeros al país.
También reconoció que, “a efecto de asegurar que el ingreso de esas personas migrantes se diera de manera ordenada, se sostuvieron diversas reuniones técnico-operativas en las que se definió el perfil de los migrantes a los que México podría aceptar, horarios y capacidad de recepción, así como otros aspectos de la instrumentación de la decisión unilateral del gobierno de Estados Unidos”.
Antes de la respuesta del gobierno mexicano, el presidente Donald Trump escribió en su cuenta de Twitter: “Los demócratas deberían deshacerse ahora de los vacíos legales. La frontera se está reparando. ¡México no permitirá que la gente pase!”.
La administración Trump buscaba que con el programa llamado Protocolos de Protección al Migrante (MPP) su gobierno pudiera desalentar la llegada de caravanas conformadas por familias y niños centroamericanos buscando asilo.