A través de una carta, el activista Bryan LeBarón pidió al presidente estadounidense, Joe Biden, investigar a funcionarios del gobierno de Morelos y Veracruz por posibles nexos con la delincuencia.
“Los ‘narcopolíticos’ son un cáncer, son la pandemia que mata personas y países”, señaló LeBarón en su cuenta de Twitter donde dio a conocer este viernes la misiva.
Su propuesta es no como intervencionismo, asegura, sino como cooperación por la seguridad binacional.
“Con base en la prioridad de su administración de combatir la corrupción a nivel internacional, creo que es importante llamar su atención sobre la gravedad de la situación al sur de la frontera”, dice en la carta. “Hace apenas unos días se dieron a conocer hechos que ilustran un probable vínculo entre mortíferas organizaciones criminales trasnacionales y altos funcionarios gubernamentales en los estados mexicanos de Morelos y Veracruz”.
En el primer caso, narra Le Barón, se trata de una fotografía difundida que muestra al gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo, posando con tres presuntos cabecillas de un cártel, así como la aparición de narcomantas en lugares públicos, detallando la supuesta relación entre Blanco y el crimen organizado.
“El segundo caso”, indica, “se trata de nueve cuerpos sin vida que aparecieron desnudos y empapados de sangre a un costado de una carretera en el estado de Veracruz junto con un mensaje dirigido al secretario de Estado de la misma entidad, señor Erick Cisneros Burgos, político cercano al gobernador del estado de Veracruz, Cuitláhuac García Jiménez, acusándolo de ser traidor al CJNG a favor de trabajar y apoyar a sus rivales, el Cártel de Sinaloa. Como de costumbre, no hay señales de qué se esté llevando a cabo una investigación seria por parte de las autoridades estatales o federales”.
En su escrito, el activista recuerda el caso del que fue víctima su familia, cuando el 4 de noviembre de 2019, grupos armados asesinaron a nueve miembros de las familias LeBarón y Langford, quienes iban en camionetas por un camino de terracería. El saldo fue de tres mujeres y seis menores muertos.
LeBarón destaca que a pesar de las mejores intenciones del presidente Andrés Manuel López Obrador y las innumerables promesas de mejoras futuras, la incapacidad y la corrupción no permiten progresar en la lucha contra el crimen.
“Sobran evidencias de qué este es un problema que México no puede manejar por sí solo, ni debería hacerlo. A decir de todo se trata de una crisis internacional e inevitablemente requerirá una respuesta internacional. Debemos entender que más allá de los discursos de soberanía, hay un problema compartido”.
Para él, la solución requiere de una coordinación que trasciende fronteras, todo ello respetando los derechos de la ciudadanía de ambos países.
“Presidente Biden, usted más que nadie en este momento de la historia puede marcar una diferencia real en el esfuerzo por reducir la violencia y la corrupción en el mundo”, dice. “Ruego que comience por concentrarse en trabajar con sus amigos cercanos y aliados que comparten su frontera sur. Ayúdenos a los mexicanos que todavía creemos en la libertad y la justicia a recuperar la esperanza de un futuro mejor demostrándole al mundo que su memorándum contra la corrupción internacional es más que unas bonitas palabras en un documento del gobierno”.
Las vidas humanas y el futuro de los niños pende de un hilo, sentencia.
Pedí al Presidente @JoeBiden 🇺🇸 que investigue posibles nexos entre algunos cárteles y los Gobernadores de Veracruz y Morelos. No como intervencionismo, como COOPERACIÓN por la SEGURIDAD BINACIONAL.
Los “narco-políticos” son un cáncer, son la pandemia que mata personas y países. pic.twitter.com/mSYhkTk0e6
— Bryan LeBaron (@BClebaron) January 14, 2022
“Señor presidente, le pido solicite a las agencias estadounidenses correspondientes que investiguen a fondo lo que está ocurriendo actualmente en Morelos y Veracruz, así como cualquier otro caso en el que los funcionarios del gobierno puedan ser cómplices del crimen organizado. Queda claro al leer su memorándum que entiende que se trata de un problema internacional. El presidente López Obrador intentará negarlo, pero los hechos son claros. La mayoría de las drogas ilegales que ingresan a los Estados Unidos llegan a través de México. Estados Unidos produce las armas y los cadáveres son ‘hechos en México’”.
Advierte que es hora de que ambos gobiernos tomen medidas concretas para hacer frente a las organizaciones criminales trasnacionales y los políticos corruptos que trabajan para ellas.
Creo que podría salvar muchas vidas, por lo que es un riesgo que vale la pena correr, dice al final de la carta.