Estados Unidos vetó el miércoles la petición del Consejo de Seguridad de la ONU de un “alto el fuego inmediato, incondicional y permanente” entre Israel y Hamás en Gaza y el acceso sin trabas de la ayuda a través del enclave.
“Estados Unidos ha dejado claro que no apoyará ninguna medida que no condene a Hamás y que no pida a Hamás que se desarme y abandone Gaza”, dijo ante el Consejo la embajadora estadounidense en funciones ante la ONU, Dorothy Shea, antes de la votación.
“Esta resolución socavaría los esfuerzos diplomáticos para alcanzar un alto el fuego que refleje las realidades sobre el terreno, y envalentonaría a Hamás”, destacó sobre el texto presentado por 10 países del Consejo de 15 miembros.
Los 14 miembros restantes del Consejo votaron a favor del proyecto de resolución.
Israel ha rechazado los llamamientos a un alto el fuego incondicional o permanente, alegando que Hamás no puede permanecer en Gaza.
Las autoridades sanitarias de Gaza afirmaron que los ataques israelíes mataron a 45 palestinos el miércoles e Israel dijo que un soldado murió en los combates.
Una crisis humanitaria se cierne también sobre el enclave de más de 2 millones de personas: La hambruna acecha y la ayuda sólo ha llegado a cuentagotas desde que Israel levantó un bloqueo de 11 semanas el 19 de mayo.
El miércoles, la Fundación Humanitaria para Gaza, respaldada por Estados Unidos, no distribuyó ninguna ayuda, mientras presionaba a Israel para que reforzara la seguridad de los civiles más allá del perímetro de sus denominados lugares seguros de distribución, tras un incidente mortal.
Antes de la votación del Consejo de Seguridad de la ONU, el jefe de ayuda de la ONU, Tom Fletcher, volvió a hacer un llamamiento para que se permita a la ONU y a los grupos de ayuda apoyar a la población de Gaza, subrayando que tienen un plan, suministros y experiencia.
“Abran todos los pasos fronterizos. Dejen entrar ayuda vital a gran escala, desde todas las direcciones. Levanten las restricciones sobre qué y cuánta ayuda podemos traer. Garantizar que nuestros convoyes no se vean obstaculizados por retrasos y denegaciones”, afirmó Fletcher en un comunicado.
La ONU lleva mucho tiempo culpando a Israel y a la anarquía en el enclave de obstaculizar la entrega de ayuda en Gaza y su distribución en toda la zona de guerra. Israel acusa a Hamás de robar la ayuda, lo que el grupo niega. (Reuters)