Los expresidentes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Dulce María Sauri y Enrique Ochoa Reza, se reunieron este miércoles con magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para hablar del proceso de impugnación de la modificación estatutaria del tricolor, que permitiría la reelección de su dirigente, Alejandro “Alito” Moreno.
Sauri y Ochoa fueron recibidos por el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón, quien está a cargo de las impugnaciones presentadas, y en días pasados resolvió que los priistas inconformes deben agotar los órganos de justicia partidaria antes de que el tribunal revise el caso.
Tras la reunión con Rodríguez, los exdirigentes y sus abogados sostuvieron un encuentro con la magistrada Janine Otálora.
Este jueves a las 10:00 de la mañana se reunirán con la magistrada presidenta, Mónica Soto, y con el magistrado Felipe Fuentes Barrera, en un horario aún por definir. También buscarán una audiencia con el magistrado Felipe de la Mata.
Sauri dijo a medios de comunicación que los magistrados “fueron absolutamente receptivos” a las impugnaciones.
“El propósito central es poder establecer un diálogo, dar a conocer de viva voz los puntos de vista y los criterios que están en nuestras impugnaciones y resaltar, sobre todo, la importancia que tiene sacar adelante estas impugnaciones para el futuro del PRI, no solamente porque es nuestro partido, sino por su papel relevante en la histórica política del país”, señaló Sauri Riancho en una entrevista con Radio Fórmula.
Por su parte, Enrique Ochoa, consideró que los órganos de justicia partidaria del PRI no han respondido oportunamente en otras ocasiones, por lo que señaló que finalmente tendrá que ser el TEPJF el que decida sobre las impugnaciones, en caso de que el instituto político no resuelva antes del 22 de julio, que es la fecha en la se inicia el registro de las candidaturas para la dirigencia nacional.
Los priistas presentaron una impugnación contra la asamblea realizada el pasado 7 de julio, en la que se aprobó la posibilidad de reelección de los dirigentes hasta por tres periodos consecutivos (12 años).
También impugnaron la convocatoria para el proceso de renovación de la dirigencia nacional para el periodo 2024-2028, debido a que aún está en curso el actual proceso electoral, que finalizará hasta la calificación de la elección presidencial por parte del TEPJF, misma que se debe producir antes del 6 se septiembre.
En ese sentido, tanto la ley como los estatutos del PRI, prohíben que se realice un cambio de dirigencia durante el proceso electoral.
El pasado 12 de julio, Dulce María Sauri aseguró en Aristegui en Vivo que Alejandro Moreno “tiene el control total de los órganos internos del partido, especialmente del Consejo Nacional”. Señaló que desde que asumió la dirigencia “ha ido quitando a cualquier voz crítica dentro de nuestro consejo”.
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