Aproximadamente 20 por ciento de las mujeres que desempeñaban una actividad económica remunerada quedaron fuera del mercado laboral durante la pandemia.
La pandemia del Covid-19 expulsó a miles de mujeres del mercado laboral, alrededor de 20 por ciento de las que estaban ocupadas, debido al cierre de actividades, así como de empresas, principalmente, de los ramos de turismo y servicios..
Así lo manifestaron Landy Sánchez y Ana Escoto, especialistas en población de El Colegio de México, quienes destacaron que la emergencia sanitaria dejó fuertes embates para hombres y mujeres en el mercado de trabajo, agudizando la situación femenina que ya de por sí era precaria en muchos sectores.
Durante el Seminario sobre Trabajo y Desigualdades (Trades) de El Colegio de México en su sesión “Doble carga, doble riesgo: el trabajo de las mujeres durante la pandemia”, las expertas destacaron que la pandemia acrecentó además la carga el trabajo de las mujeres en los hogares.
Expusieron que durante el confinamiento muchas mujeres vieron interrumpida su actividad laboral y con ella buena parte de sus percepciones o quedaron sin ingresos, se incrementaron las actividades domésticas, el cuidado de menores al estar cerradas las instituciones que confluyen como redes de apoyo de los mismos.
Asimismo, la instrucción escolar que vino a sustituir el trabajo de los maestros ante el cierre de escuelas durante la emergencia sanitaria, recayendo sobre todo en las madres y la falta de trabajo remunerado, hay que en más de 60 por ciento de los hogares los menores de siete años son cuidados por los padres.
Alertaron que aproximadamente 20 por ciento de las mujeres que desempeñaban una actividad económica remunerada quedaron fuera del mercado laboral durante la pandemia, ya que los sectores principales a los que se dedican son el de servicios y hospedaje, además del sector informal, los cuales en su mayor parte fueron considerados como no esenciales y debieron parar actividades.
Mientras tanto, señalaron, en el hogar aumentó la carga de trabajo para las mujeres, quienes ya enfrentaban un mercado de trabajo con una participación estancada, aunque cifras certeras se tendrán hasta el censo de población y vivienda que estaba en desarrollo este año.
Landy Sánchez, profesora investigadora del Centro de Estudios Demográficos, Urbanos y Ambientales de El Colegio de México, dijo que la pandemia acrecentó el trabajo doméstico de las mujeres, quienes ya aportaban a éste 26 horas en promedio, mientras que sólo seis horas los varones, situación de desventaja aceptada socialmente y también ocurre por la organización de las instituciones.
Ana Escoto, doctora en Estudios de Población de la institución referida, explicó que debido a que buena parte de las mujeres ocupadas laboraban en los sectores de turismo y servicios antes de la pandemia, muchas ya no participan en el mercado de trabajo ante el cierre de actividades no esenciales.
Hay una disminución, detalló, de 20 por ciento de la tasa de participación económica de mujeres que ya no estarían ocupadas, lo que se agudizó porque el mercado mexicano se caracteriza por una participación femenina estancada y trabajo segregado.
“La pandemia hizo evidente la inestabilidad laboral, los despidos, empleos sin seguridad social, un conjunto de desigualdades en el mercado de trabajo. La doble desigualdad que las mujeres viven la mostró en toda su expresión”, agregó Landy Sánchez. (Ntx)