La empresa On ha salido a Bolsa lanzada. Las acciones de la empresa suiza de zapatillas deportivas, respaldada por Roger Federer, se dispararon un 50% en su debut en Nueva York el miércoles, y su valoración se ha encaramado hasta los 11.000 millones de dólares. El maestro del tenis compró una participación en la empresa hace dos años valorada en ese momento en 54 millones de dólares, según varios diarios suizos. Desde entonces, lleva una trayectoria estelar, impulsada sobre todo por el auge del running en la pandemia. Las ventas han subido un 60% anual y el ritmo puede haber aumentado aún más este año: los ingresos en Norteamérica, el mayor mercado de On, se han duplicado respecto al año anterior en el primer semestre.
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Dicho esto, la valoración de 11.000 millones de dólares, equivalente a 13 veces las ventas previstas de On este año, parece excesiva. Nike, con un valor actual de 249.000 millones de dólares, cotiza a 5 veces las ventas de este año. Por su parte, Lululemon, fabricante de pantalones de yoga irresistibles para quienes siguen la moda, con un valor de 54.000 millones de dólares, cotiza a menos de 9 veces. Si On se valorara conforme al múltiplo de ingresos previstos de Lululemon para el próximo año, tendría que duplicar sus ingresos en los próximos 12 meses.
El rendimiento reciente de On demuestra que es posible. Pero siempre estará ante el riesgo de tropezar con problemas. On considera que las esponjas tubulares de las suelas de sus zapatillas de 200 dólares le dan una ventaja. Pero el mercado de las zapatillas de alta tecnología está muy concurrido. Además de Nike, Asics, Adidas y otras empresas advenedizas como Brooks Running, están invirtiendo a conciencia en sus propios modelos para correr más rápido.
El hecho de fabricar casi exclusivamente en Vietnam, actualmente inmerso en una grave ola de covid-19, es otro riesgo. Y hay dudas sobre sus perspectivas en China. No es que Federer vaya a preocuparse demasiado. Suponiendo que haya mantenido sus acciones, habría que apuntarle otro ace.
Para más información: breakingviews.reuters.com. Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción es responsabilidad de EL PAÍS
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