Se trata del primer viaje del vicepresidente estadounidense a Irak y tiene lugar casi un año después de la visita sorpresiva del presidente Donald Trump al país.
El vicepresidente Mike Pence aterrizó este sábado en Irak en una visita sorpresa, para reunirse con las tropas estadounidenses previo al Día de Acción de Gracias.
Pence y su esposa Karen Pence arribaron a la Base de la Fuerza Aérea Al Asad en la provincia de Anbar, en el oeste de Irak, donde paso revista a las tropas estadounidenses, en medio de las protestas antigubernamentales, en las que han muerto más de 330 personas.
De acuerdo con CNN, Pence recibió un informe clasificado del oficial al mando en la base y habló por teléfono con el primer ministro iraquí, Adil Abdul Mahdi.
En la llamada, Pence le dijo a Mahdi que viajó a Irak en parte para “extender su gratitud a los hombres y mujeres (del ejército estadounidense) que sirven en su país”, según el grupo de viajes de televisión con el vicepresidente
Happy Thanksgiving from Iraq. @SecondLady and I are so honored to be with our Soldiers, Sailors, Airmen, and Marines here in Iraq! We are so proud of you and thankful for you all! pic.twitter.com/bzcM1fGgiG
— Vice President Mike Pence (@VP) November 23, 2019
Pence dijo a los miembros del servicio que la administración Trump estaba “luchando para asegurar otro aumento salarial para los hombres y mujeres en el ejército”, pero agregó que “necesitamos que el Congreso haga su trabajo“.
“El Congreso debería haber terminado su trabajo hace meses, pero ustedes saben que la política partidista y las investigaciones interminables han retrasado las cosas”, dijo Pence, según el grupo, refiriéndose a los procedimientos de juicio político de la Cámara contra el presidente Donald Trump y Ucrania.
Se trata del primer viaje del vicepresidente estadounidense a Irak y tiene lugar casi un año después de la visita sorpresiva del presidente Donald Trump al país, reportó la cadena árabe Al Arabiya.
La estancia de Pence en Irak, donde Estados Unidos tiene unos cinco mil 200 soldados desplegados en bases iraquíes en todo el país, ocurre en medio de las manifestaciones iniciadas desde el pasado 1 de octubre en protesta contra la corrupción, el alto índice de desempleo y la falta de servicios públicos.
Desde entonces, más de 330 personas han muerto y unas 15 mil han resultado heridas, además cientos han sido detenidos, en el marco de las protestas en Bagad y varias provincias chiitas del sur del país, de acuerdo con cifras de la Comisión Independiente iraquí de Derechos Humanos.