Fernando Belasteguín celebra este jueves su 43 cumpleaños. Con una vida dedicada al pádel, deporte que empezó a practicar en su argentina natal cuando era solo un niño de 13 años, es el jugador más laureado de toda la historia.
Su palmarés cuenta con la friolera de 160 títulos cosechados solo en el circuito profesional. Pero, sin duda, su mayor logro es la preciosa familia que ha creado junto a su mujer Cristina. Ambos son padres de tres niños Federico, Sofía y Bea, que se han convertido en el “pilar” de su vida.
“Si me ves jugar puedes tener la sensación de que soy indestructible, que parezco un ordenador dentro de una cancha de pádel, pero con la familia soy como un castillo de arena. Si no estoy bien en la familia, ese castillo tan fuerte pasa a ser muy débil. Mi familia, tanto la de Argentina como la que he podido hacer en España, son el pilar de mi vida y de mi carrera”, explicó el argentino durante una entrevista a MD.
El tiempo parece no pasar pasar Belasteguín, que este 2022 arrancó la temporada con una victoria contra Lucas Campagnolo y Javi Garrido y se llevó así el título inaugural del WPT en Miami con Arturo Coello de pareja.
Sin embargo, el jugador de revés no es solo un deportista excepcional sino que es una persona excepcional. Con el paso del tiempo, se ha consagrado como una de las figuras del deporte más admiradas en nuestro país. Se ha ganado a pulso el respeto y el cariño de sus compañeros de profesión. Su humildad y sencillez le hacen grande. Su espíritu de mejora constante y su entrega en las pistas le convierten en un ejemplo de actitud hacia la vida. ‘Bela’ es único y será eterno.