Los militares franceses de la Operación Barkhane en el Sahel han abatido a uno de sus principales objetivos desde hace un año. Según ha anunciado el Ministerio de Defensa en París este martes, Soumana Boura fue “neutralizado” la víspera en una operación coordinada con las Fuerzas Armadas nigerinas. El yihadista era jefe de grupo del Estado Islámico en el Gran Sáhara (EIGS) en Níger y, sobre todo, estaba señalado como uno de los autores materiales del asesinato, en agosto del año pasado, de seis cooperantes franceses y dos ciudadanos nigerinos en la reserva de jirafas de Kouré, en la región de Tillabéri, en el noroeste del país africano.
“Las fuerzas armadas francesas siguen combatiendo sin descanso a los grupos armados terroristas del Sahel: Un responsable del EIGS, afiliado al ISIS [Estado Islámico], ha sido neutralizado”, celebró la ministra de Defensa, Florence Parly, en las redes sociales.
Según Defensa, la operación tuvo lugar el lunes. “Tras haberlo localizado en una zona santuario del EIGS al norte de la ciudad de Tillabéri, y después de haberlo identificado formalmente, [Boura] fue neutralizado mediante un ataque aéreo”, explicó el ministerio en un comunicado. “A continuación, un comando fue aerotransportado para reconocer y registrar la zona del ataque”, agrega la información oficial.
Boura estaba al frente de un grupo de “varias decenas de combatientes activos del EIGS” en la zona de Gober Gourou y Firo, en el oeste de Níger. Francia lo había señalado como uno de los autores materiales del asesinato de seis cooperantes franceses de la ONG gala Acted y dos ciudadanos nigerinos que los acompañaban, en un ataque perpetrado el 9 de agosto de 2020 en la reserva natural de Kouré. Según el Ministerio de Defensa, Boura fue el encargado de “filmar la ejecución” de los cooperantes y “asegurar su divulgación”.
La muerte de Boura “permite luchar contra la expansión del EIGS e impedir que tome el control de algunas partes de la región de las Tres Fronteras (Burkina Faso-Níger-Malí)”, afirma París. Su “neutralización” se produce apenas unos meses después de que Francia diera uno de los mayores golpes al yihadismo en el Sahel al anunciar que había abatido en agosto al líder del EIGS, Abou Walid al Saharaui, uno de los terroristas más buscados de África y señalado como el hombre que dio la orden de perpetrar el ataque contra los cooperantes franceses. El presidente galo, Emmanuel Macron, celebró esa noticia como un “nuevo gran éxito en el combate contra los grupos terroristas en el Sahel”.
El EIGS ha sido uno de los objetivos privilegiados de la Operación Barkhane en los últimos meses. A mediados de junio, Francia anunciaba la captura de otros dos jefes de grupo, Dadi Ould Chaib, alias Abu Dardar, y Sidi Ahmedl Ould Mohamed, alias Khattab al Mauritani, así como la muerte de un tercer alto mando, Almahmoud ag Baye, alias Ikaray. Un mes más tarde, Francia informaba de la “neutralización” también del coordinador logístico y financiero del EIGS y “verdadero jefe del EIGS en Malí”, Issa al Sahraoui, y del número dos del grupo yihadista encargado de los juicios del EIGS, Abou Abderahmane al Sahraoui.
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