Froilán acaba de empezar una nueva vida en Abu Dabi alejado del foco mediático. En el último año ha visto cómo su nombre ha sido salpicado por numerosos escándalos, lo que ha hecho que su madre, la infanta Elena, se replantee su futuro y lo mande junto a su abuelo para que deje de sonar en la crónica social. Sin embargo, parece que esta rebeldía viene de mucho tiempo atrás, pues el sobrino de Felipe VI ha sido considerado, desde siempre, el infante terrible o, más actual, ‘Froilán de todos los antros’.
Su currículum de rebelde comenzó con tan solo cinco años, cuando le dio una patada a su prima Victoria López de Quesada durante la boda real de Felipe VI y Letizia. 25 millones de telespectadores fueron testigo de esta travesura que ha pasado a la historia. El joven continuó haciendo alarde de su carácter y, demostrando que no le gustaba ser perseguido por la prensa, protagonizó otro pequeño escándalo. Mientras la familia al completo posaba para una foto oficial, el joven le hizo la peineta a la cámara.
Pero la travesura más sonada fue su polémico autodisparo. Con tan solo 13 años, Froilán tuvo que ser operado de urgencia en la clínica Quirón de Madrid tras recibir un disparo en un pie que se propinó él mismo. La Casa Real entonces justificó que el hijo de la infanta Elena se encontraba en la finca familiar de Garrejo en Garray realizando ejercicios de tiro con su padre cuando, en un descuido, se autolesionó. Jaime de Marichalar tuvo que declarar ante la Guardia Civil, pues se trataba de un arma que no podía ser manejada por menores de 14 años.
Su posición política también ha sido objeto de críticas. En 2018, Froilán tuvo un enfrentamiento con varios dirigentes del Partido Comunista de Andalucía con los que coincidió en la cafetería del AVE. «Me dais asco», les dijo. Tan solo un año después, el hijo de la infanta Elena se convertía en protagonista de la actualidad al acudir a una manifestación en Colón promovida por PP, Ciudadanos y Vox; una concentración para protestar contra Pedro Sánchez a la que asistió sin permiso de la Zarzuela.
Y, aunque se creía que sus escándalos iban a quedar en el pasado conforme fuese cumpliendo años, nada más lejos de la realidad. El pasado mes de julio, el nieto de don Juan Carlos se vio envuelto en un tiroteo en la discoteca Opium mientras celebraba su cumpleaños. Un incidente que, al parecer, no tuvo nada que ver con él y que dejó hasta cinco heridos. Tan solo un mes después, su nombre volvía a la palestra al conocerse que había protagonizado una escena de celos por Mar Torres, su ex novia. La ex pareja coincidió en una conocida discoteca de Marbella y, mientras la heredera de El Pozo disfrutaba con su novio, el sobrino del Rey no pudo controlar los celos y se enfrentó a él.
Pero el gran escándalo llegó en diciembre, cuando el hijo de la duquesa de Lugo se vio implicado en una pelea con navajas a las puertas de una conocida discoteca de la capital ubicada en el barrio Salamanca. Pero el escándalo definitivo que hizo que Froilán abandonase España por un tiempo fue el ocurrido el pasado mes de febrero, cuando tuvo que ser desalojado de un after ilegal. Fuentes policiales informaron que entre las personas que fueron desalojadas el pasado domingo en Clandestinno se encontraban varias de ideología de extrema derecha, aluniceros y algunos empresarios.
Source link