Andoni
Gorosabel (Arrasate, 1996) espera que la Real se ponga en contacto con él para proponer una prórroga de su contrato, que expira el 30 de junio de 2021. El club está inmerso en la ampliación del vínculo de futbolistas que tienen fichas que van más allá de esa fecha, como Llorente, Le
Normand y Merino y el lateral de arrasatearra, consciente de que goza de la confianza de los técnicos y de Roberto
Olabe, está convencido de que próximamente comenzarán las conversaciones y que quizá también le lleguen propuestas de otras latitudes, como le ha sucedido en el pasado.
Es evidente que Gorosabel ha vivido a la sombra de Joseba
Zaldua esta temporada, aunque está satisfecho con el notable nivel que ha ofrecido en los 10 encuentros oficiales en los que ha intervenido, seis en Liga y otros cuatro en Copa del Rey. Cuando el entrenador no ha querido o no ha podido contar con el lateral derecho titular, el colectivo no se ha resentido, por las buenas prestaciones ofrecidas por el arrasatearra.
Sus mejores encuentros fueron ante el Alavés (victoria 3-0) y el Barcelona (derrota 1-0) en Liga y contra Osasuna (3-1) y Real Madrid (3-4) en el Santiago Bernabéu. No podrá olvidar el joven lateral los minutos que tuvo que pasar tras ser expulsado en la cancha del Real Madrid, al borde del ataque de nervios en el túnel de vestuarios, ni su gran jugada en el preludio del cuarto y último tanto.
No obstante, lógicamente, su intención era la de tener un mayor protagonismo y tratar de discutirle en mayor medida la plaza a Joseba
Zaldua. Y ahora se le abre un horizonte de incertidumbre de cara al futuro por cuanto está previsto que en verano vuelva otro lateral derecho como Álex
Sola, cuyas prestaciones en Soria con el Numancia a sus 20 años están convenciendo al club. Y tres son multitud para un único puesto.
Olabe frenó su cesión al ’Lega’
Gorosabel fundamenta su optimismo en seguir siendo jugador de la Real en la confianza que siempre ha tenido de los técnicos y del ‘jefe’, Roberto
Olabe. De hecho, fue el director general de fútbol en persona el que el pasado verano abortó la salida al Leganés en calidad de cedido del lateral arrasatearra. El cuadro madrileño estaba convencido de que iba a ser un gran refuerzo y el futbolista de la Real, fortalecido por la experiencia positiva anterior de Zaldua en el mismo destino, estaba dispuesto a aceptar esa oferta y disponer en Butarque de los minutos que presumiblemente le iban a faltar en la Real.
Al final se quedó porque la decisión fue la de ceder a Álex
Sola al Numancia, pero no cumplió su objetivo de jugar con cierta asiduidad. Lo curioso es que, a pesar de su juventud y de su inexperiencia -suma 22 partidos en la Real en total-, tuvo la oportunidad de ser capitán de la escuadra txuri urdin en un amistoso disputado en Tajonar ante Osasuna.
Como a todos los jugadores de la Real, el parón le llegó en un buen momento a Gorosabel, que en el penúltimo partido había ofrecido una gran imagen contra el Barcelona de Messi nada menos que en el Camp Nou.
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