El elevado riesgo de infección entre grandes multitudes ha llevado a su oponente, Joe Biden, a recibir la nominación del Partido Demócrata durante un evento en línea.
A medida que aumentan los casos de coronavirus en Florida, crece el escepticismo de que los organizadores de la Convención Nacional Republicana puedan llevar a cabo la gran fiesta que el presidente Donald Trump prometió para su repostulación.
Los donantes están reacios a financiar un evento asediado por la incertidumbre y la posible mala prensa si grandes multitudes se relacionan posteriormente con nuevas infecciones, según entrevistas con seis fuentes del Partido Republicano, que hablaron bajo condición de anonimato.
Los organizadores están considerando trasladar la convención desde el VyStar Veterans Memorial Arena en Jacksonville, Florida, a uno de los dos estadios al aire libre cercanos para abordar las preocupaciones sobre la rápida propagación del coronavirus en el interior, dijeron a Reuters dos de las fuentes que están familiarizadas con la planificación.
El propio Trump ha estado contactando a los principales responsables de la campaña en los últimos días para pedirles consejo sobre si creen que la convención del 24-27 de agosto puede seguir adelante como se ha previsto, según dos fuentes.
“Es como construir un avión mientras se intenta despegar”, indicó un funcionario sobre la planificación. La campaña de Trump y el Comité Nacional Republicano no quisieron hacer comentarios.
Las dudas en torno a la convención surgen mientras Trump se ubica detrás de su oponente demócrata Joe Biden en los sondeos de opinión antes de las elecciones del 3 de noviembre, en parte debido a la insatisfacción de los votantes con el manejo de la pandemia.
La Convención Nacional Demócrata está siendo replanteada como un asunto mayormente virtual, pero todavía se espera que Biden viaje a Milwaukee, Wisconsin, para aceptar la nominación de su partido.
En una conferencia telefónica el martes, los funcionarios de la campaña de Trump presionaron al personal y a los voluntarios respecto al estado de la planificación de la convención, con la esperanza de una evaluación realista de la situación.
“No hubo muchas buenas respuestas”, dijo un funcionario que estaba en la llamada. “Tengo la sensación de que se está haciendo un gran examen de conciencia en este momento dentro de la campaña sobre cómo proceder”. (Rts)