Como “fortuita” calificó el Gobierno de Guatemala la detonación de un artefacto en un autobús de pasajeros este lunes que dejó seis heridos, incluida la supuesta pandillera que llevaba el explosivo.
El ministro de Gobernación (Interior), Enrique Degenhart, explicó en una conferencia de prensa que no era una granada de fragmentación sino un artefacto de fabricación casera que la mujer transportaba para amenazar al chófer como parte del cobro de una extorsión.
“Aparentemente la pandillera fue empujada por el piloto del autobús y cuando cayó explotó el artefacto casero y le cercenó varios dedos. Ya está siendo atendida”, dijo el funcionario en el Palacio Nacional de la Cultura, después de participar en la reunión semanal del Gabinete de Gobierno.
Según el portavoz de los Bomberos Municipales, Edwin Villagrán, la mujer con las amputaciones fue identificada como Mirna Elizabeth Juárez, de 19 años de edad.
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La joven y los otros cinco heridos fueron trasladados al hospital Roosevelt, cuyo director, Marco Antonio Barrientos, los identificó como Reyna Isabel Gramajo, 63 años y con esquirlas en una pierna.
También Mario Enrique Alvizures, de 26 y con esquirlas en rostro; Marta Flora Peres, de 32 y con heridas en una pierna, Nicolás Cot Méndez, de 79 y con una laceración en el rostro y Dorian Noelia Pérez, de 23 y quien presenta golpes en una rodilla.
El ministro agregó que la camioneta “no tiene ningún tipo de destrucción” e insistió en que el hecho fue “fortuito” del fenómeno del “terrorismo urbano” de las pandillas.
“El hecho de que una pandillera haya amenazado al piloto del autobús con una bomba de fabricación casera ya sale de todo control”, pero la Policía Nacional Civil “ya está investigando para determinar la estructura a la que pertenece”, subrayó.
Degenhart enfatizó que este uso de artefactos no es frecuente y reiteró que “no es un ataque directo, es un ataque fortuito, en el que la pandillera amenazó al piloto con la extorsión, él la empujó y generó que se explotara”.
Sin embargo, reconoció que la extorsión “es un fenómeno criminal directo” contra el transporte de pasajeros y por ello recordó que el compromiso de las fuerzas de seguridad es dar protección a los ciudadanos.
“Yo siempre he dicho que las pandillas son terroristas urbanos y es importante que la población esté consciente que estas personas no tienen el mínimo interés por la vida humana”, proclamó, y aseguró que harán “una investigación profunda” porque “estamos a las puertas de un evento electoral que se debe desarrollar democráticamente”.
El ministro dijo que a raíz de este hecho se analizará un plan preventivo para garantizar la seguridad de los guatemaltecos.
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