“Frentes Políticos”, en Excélsior:
“Como un mal perdedor se presenta Luis Alberto Villarreal, quien fue derrotado en las elecciones de San Miguel de Allende, en Guanajuato. Debe estar desesperado. Sólo así se entiende que pretenda impugnar los resultados del domingo para inclinar la balanza a su favor. Y eso que debe ser terrible el haber pactado con empresarios de la zona, en turbias negociaciones, esas alianzas que han permitido devastar los recursos naturales de la región, principalmente el agua. Su voracidad y la de los empresarios que representa tiene en alerta a los pobladores, pues cuentan que Villarreal tenía ya predestinado el uso de suelo de un terreno para la construcción de 7 mil viviendas. ¿Alguna sólida institución que les defienda de este escenario?”.
“Templo Mayor”, en Reforma:
“¡Saquen las palomitas! Las tribus de Morena ya están sonando los tambores de guerra y en estos días se viene una guerra interna, con puñaladas por la espalda, patadas bajo la mesa y piquetes de ojo, que ya la hubieran querido para un capítulo de Game of Thrones. Pese a los desesperados y desmañanados intentos del presidente por decir que su covimiento ganó en las elecciones, la realidad es que diversos cuadros morenistas están planteando la necesidad de hacer autocrítica, y de paso un purga, tras la barrida que les puso la oposición en la Ciudad de México”.
“Bajo Reserva”, en El Universal:
“Nos dicen que el gobierno de Oaxaca, que encabeza el priista Alejandro Murat Hinojosa, recibió este fin de semana la gira de trabajo número 23 del presidente Andrés Manuel López Obrador y una calificación más que positiva por parte del mandatario. La expresión del presidente de que ‘todo Oaxaca es un primor’ (como las siglas del PRI y Morena) el sábado en San Vicente Coatlán fue recibida por algunos como un nuevo guió de AMLO al PRI”.
“Trascendió” en Milenio:
“A pesar de que en todo momento se han declarado aliados y más aún tras el proceso electoral 2021, hay que poner atención a la alianza entre el PVEM y Morena, ya que comienza a verse debilitada por diversos amagos desde la autoridad. Cada vez de forma más constante se observan signos de que el partido guinda, desde sus posiciones en el gobierno federal, mantendrá dura la pierna en casos de corrupción, aunque se trate de figuras que hayan apoyado a la 4T, en momentos en que las sumas en la nueva Legislatura serán determinantes”.
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