La dependencia señaló que la economía mexicana observó una menor expansión con un desempeño mixto entre enero y junio de este año.
En enero-junio de 2019, el gasto neto pagado se ubicó en dos billones 775 mil 727 millones de pesos, lo que implicó un subejercicio de 174 mil 484 millones de pesos (4.5 por ciento) respecto a lo que se tenía programado para este periodo.
Refirió que el menor gasto respecto al calendarizado se explica por un menor gasto programable en 123 mil 751 millones de pesos y un menor gasto no programable en 50 mil 734 millones de pesos.
En un informe, la Secretaría de Hacienda reportó que se registró un superávit primario del sector público, definido como la diferencia entre los ingresos totales y los gastos distintos del costo financiero, de 228 mil 88 millones de pesos, mayor al monto previsto originalmente de 135 mil 434 millones de pesos y al registrado el año anterior de 126 mil 878 millones de pesos.
Este nivel de superávit primario es compatible con el estimado en los Criterios Generales de Política Económica 2019 de 1.0 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), refirió la dependencia federal.
En el primer semestre de 2019, las finanzas públicas presentaron un déficit de 119 mil 922 millones de pesos, menor al previsto en el programa de 258 mil 873 millones y al déficit de 206 mil 731 millones de pesos observado en el mismo periodo de 2018.
Por su parte, los ingresos presupuestarios del sector público se ubicaron en dos billones 622 mil 608 millones de pesos, con un aumento de 0.6 por ciento en términos reales en el primer semestre respecto al mismo periodo de 2018, y resultaron inferiores al programa en 68 mil 430 millones de pesos, como resultado de los menores ingresos petroleros observados en el periodo.
En tanto, en el primer semestre de 2019, los Requerimientos Financieros del Sector Público, la medida más amplia y robusta de balance del Sector Público Federal, registraron un déficit de 60 mil 941 millones de pesos, menor al déficit observado en 2018 de 236 mil 322 millones de pesos.
El Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público al segundo trimestre de 2019 fue de 42.5 por ciento del PIB, expuso la Secretaría de Hacienda.
Señaló que en el primer semestre de 2019, la economía mexicana observó una menor expansión con un desempeño mixto, pero los principales balances de las finanzas públicas presentaron mejores resultados a lo programado.
Expuso que los indicadores disponibles sugieren un crecimiento más moderado en la actividad económica de México para el segundo trimestre del año.
La dependencia detalló que los resultados son mixtos, toda vez que el sector más dinámico de la economía ha sido el agropecuario, mientras que el industrial presenta una contracción, debido principalmente a las caídas en construcción y minería, así como la desaceleración en el sector servicios.
Sin embargo, consideró que la previsión de una menor actividad económica global y la prevalencia de disputas comerciales entre algunas de las principales economías del mundo, que se reflejan también en una previsión de menor crecimiento económico en el país, han exacerbado un clima de mayor incertidumbre.
Esto a su vez se traduce en un comportamiento más cauto en los patrones de gasto de los agentes económicos a nivel nacional, conteniendo, principalmente, la implementación de nuevos proyectos de inversión, abundó.
Asimismo, la dependencia encargada de las finanzas públicas observó que la tendencia decreciente en el gasto de inversión observada en los últimos años continuó presentándose en el primer semestre del año.
En contraparte, dentro de las operaciones registradas con el exterior, las exportaciones no petroleras, principalmente aquellas dirigidas a Estados Unidos en los sectores manufacturero y agropecuario, aumentaron de manera importante, lo cual generó un mayor superávit en la balanza comercial en el segundo trimestre de 2019.
Si bien se ha observado una menor expansión en la actividad económica del país, la información disponible al cierre del segundo trimestre del año muestra que el comportamiento del mercado laboral se ha estabilizado, lo cual se confirma con las tasas de desocupación registradas durante enero-junio, las cuales son similares a las registradas a finales de 2018, agregó.
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Resaltó que la estabilidad en el mercado laboral, con los incrementos en el salario mínimo materializados a principios de año y la trayectoria descendente de la inflación, han permitido un crecimiento en los salarios reales durante el segundo trimestre del año.
Precisó que a pesar de este entorno económico, al cierre del primer semestre de 2019, los principales balances de finanzas públicas registraron resultados mejores que lo programado.