“Qué periodo tan difícil para el mundo del espectáculo, para todos los artistas, técnicos, tramoyistas y para las mujeres que han luchado por esta profesión tan estigmatizada por la inseguridad económica”. Así empieza el mensaje oficial del Día Mundial del Teatro, que se celebra este sábado, encargado este año a la conocida actriz británica Helen Mirren (Londres, 75 años). “La maravillosa cultura del teatro vivirá mientras habitemos la Tierra. La impulsión creativa de los escritores, de los diseñadores, de los cantantes, de los actores, de los músicos y de los directores, no será jamás estrangulada y en un futuro muy cercano se desarrollará otra vez con fuerza y con una nueva manera de ver el mundo. ¡Estoy ansiosa!”.
Por segundo año consecutivo, el sector de las artes escénicas celebra su fiesta mayor con los telones bajados en las principales capitales del género: Broadway, Londres, París, Berlín… todo cerrado. En los últimos meses grandes figuras de la escena internacional (Wajdi Mouawad, Milo Rau, Tiago Rodrigues, Guy Cassiers, entre otros) han reclamado en distintos manifiestos la reapertura de las salas y en Francia sigue creciendo el movimiento de ocupación de teatros para reivindicar la vuelta a la actividad bajo el lema La cultura es segura, el mismo que ha funcionado para que en España se permitiera la actividad de manera ininterrumpida desde el verano, lo que ha convertido a este país en la envidia de Europa.
Tras el Odéon, el movimiento de ocupación de teatros se extiende por toda Francia
Pero el sector advierte: el milagro español es más resultado de la necesidad que de una política de verdadero apoyo por parte de las Administraciones, pues el presupuesto destinado a ayudar a los artistas a soportar los cierres en otros países es inimaginable en España. Es decir, aunque los teatros estén abiertos, la penuria económica es igual o mayor.
No hay todavía datos oficiales nacionales, pero sí algunas estadísticas parciales que ofrecen pistas. Una encuesta realizada entre 3.000 socios de AISGE (la sociedad que gestiona los derechos de los intérpretes) concluye que el 97% de los actores y bailarines del país han visto reducidos los ingresos que reciben por trabajos artísticos por debajo del umbral de la pobreza.
Los datos que la federación estatal de empresas de teatro y danza (Faeteda) extrae de su programa Chivatos, que recoge y procesa semanalmente datos enviados por dos centenares de recintos, son también terroríficos y extrapolables a todo el sector: en 2020, pese a que la actividad empezó a reanudarse en verano, la recaudación disminuyó un 66% respecto al año anterior, con un descenso del 62% en el número de espectadores y un 55% en el cómputo de funciones.
Son cifras similares a las que arroja el balance del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música sobre sus unidades de producción (el Centro Dramático Nacional y la Compañía Nacional de Teatro Clásico, entre ellas) y recintos propios (los teatros María Guerrero, Comedia o Zarzuela): la recaudación se redujo en 7,5 millones de euros, pasando de 11,7 en 2019 a 4,2 en 2020, lo que supone una caída del 64,25%.
“Es urgente”
Con este panorama, los profesionales llegan al Día Mundial de Teatro con ánimo reivindicativo, más que de celebración. Asociaciones de todos los ámbitos (artistas, técnicos, productores, distribuidores) lanzaron el martes en un foro virtual organizado por Mercartes (la gran feria nacional del sector, aplazada este año a noviembre) una declaración que recoge sus principales demandas. Entre ellas, la unificación de criterios en todas las comunidades autónomas, bajada del IVA y regulación del streaming. “Es urgente empezar a pensar cómo legislarlo. Es un fenómeno que ha crecido mucho durante la pandemia sin que esté claro el marco de relaciones laborales, pues es una actividad a caballo entre el teatro y el audiovisual. También hay que acotar sus límites y la relación con los espectadores”, advierte el presidente de Faeteda, Jesús Cimarro, que hace hincapié también en la necesidad de retomar el desarrollo del Estatuto del Artista, interrumpido por la pandemia.
La diversidad de criterios en todo el país es otro asunto que preocupa a los profesionales. No solo porque impide desarrollar un plan estratégico común para relanzar la actividad, sino también porque dificulta la gestión de las producciones, contrataciones o giras, que se ha vuelto un infierno por la pandemia. Carlos Morán, presidente de Redescena (red de recintos, circuitos y festivales de titularidad pública), lo explica así: “En cada autonomía rigen aforos, horarios y medidas de seguridad distintas. Las hay que permiten un 75% y en otras ha habido momentos en los que el número de espectadores estuvo limitado a 25 o 50 personas. Así es muy difícil sacar adelante una gira, las cuentas no salen. Y muchas compañías se van a quedar por el camino si esto no mejora”.
Si a esto añadimos los continuos imprevistos que el sector afronta a diario, desde cancelaciones por casos de contagio hasta cambios de horarios y aplazamientos, se entiende que algunos permanezcan cerrados y que la producción esté a medio gas, con proyectos de escaso riesgo artístico en general. “En términos agrícolas, digamos que la cosecha de esta temporada es corta —reconoce Cimarro—. Aun así, pensamos que vale la pena estar abiertos. El público lo ha agradecido llenando las salas desde que reabrimos y demostrando que la cultura es un bien esencial que debemos proteger entre todos”.
Mensaje de Helen Mirren
Reproducimos íntegro el mensaje del Instituto Internacional del Teatro para el Día Mundial del Teatro, redactado este año por la actriz británica Helen Mirren.
“Qué periodo tan difícil para el mundo del espectáculo, para todos los artistas, técnicos, tramoyistas y para las mujeres que han luchado por esta profesión tan estigmatizada por la inseguridad económica. Puede ser que esta situación de inseguridad permanente les haya vuelto más fuertes para poder sobrevivir a esta pandemia con dignidad. Su imaginación ha sido traducida en estas nuevas circunstancias en formas de comunicar, inventivas, imaginativas, conmovedoras, todo esto por supuesto gracias a internet. Los seres humanos se cuentan historias desde tiempos muy remotos, desde que existimos en el planeta. La maravillosa cultura del teatro vivirá mientras habitemos la Tierra. La impulsión creativa de los escritores, de los diseñadores, de los cantantes, de los actores, de los músicos y de los directores, no será jamás estrangulada y en un futuro muy cercano se desarrollara otra vez con fuerza y con una nueva manera de ver el mundo.
¡Estoy ansiosa!”.
Traducción de Yahaira Salazar, presidenta de la delegación en Venezuela del Instituto Internacional del Teatro.
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