Por Armando Guerra
Querétaro, Qro.- 11 Octubre de 2019.- Algunos dicen que son el poder tras el trono; que ellos son los que realmente gobiernan Querétaro, otros que son los jefes de la mafia, como diría nuestro popular y querido Presidente Electo de México AMLO, lo cierto es que los hermanos Juan Martin y Juan Marcos Granados Torres desde la campaña de su “amigo” gobernador Francisco Domínguez se allanaron el camino para hacerse del control político de todo el estado, ello independientemente de los barruntos de nepotismo en los que pudieran estar cayendo, pues en esta administración estatal uno es Secretario de Gobierno y el otro Secretario de Seguridad Ciudadana.
Conflicto de intereses, tráfico de influencias, represión y autoritarismo son el común denominador de los hermanos Granados Torres que han hecho de Querétaro, su botín político, pero sobre todo han buscado mantener controlado el Poder de la Justicia, para elle, junto con diputados panistas impulsaron desde el Congreso la creación de la Fiscalía del Estado a donde impusieron a su fiscal “carnal” el ex jefe policiaco Alejandro Echeverría Cornejo quien siempre estuvo vinculado a la ex tinta PGJ y desde ahí hizo relaciones y “migas” con los hermanos Granados Torres.
Conflicto de intereses y tráfico de influencias se dan desde el momento mismo en que el Secretario de Gobierno decide imponer, proponer e impulsar a su esposa Mariela Ponce Villa como nueva magistrada de la Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia, una dependencia aliada ya de los hermanos Granados Torres que tienen bajo su control el Poder Judicial, pues ya tienen a su libre albedrío el Poder Ejecutivo.
Hace días, pretendieron mantener a su control el Poder Legislativo ya que siendo Juan Martin Granados “socio” y amigo del líder transportista Juan Barrios, pretendiendo hacerse del control del Legislativo proponiendo a la diputada Local Elsa Méndez como próxima Lider del Congreso, pero el panismo de abolengo jamás lo permitió, ni lo permitirá.
Fiscal “Carnal” al servicio de los Granados
Los hermanos Granados Torres propusieron al gobernador un Fiscal “carnal” que obedeciera a sus intereses, por ello que impulsaron la llegada de Alejandro Echeverria Cornejo quien ya forma parte de esa tripleta que ostenta el poder en Querétaro, pues son ellos los que hacen y deshacen en el Estado, ello a pesar de que catedráticos, abogados litigantes, líderes sociales, comunicadores y hasta ciudadanos se quejen de imparcialidad en juicios, de acosos a actores políticos que se atreven a cruzarse en su camino.
Como tienen el poder, siembran delitos, manejan la justicia a su antojo y hasta se atreven a mandar mensajes intimidatorios a todo aquel que no esté de acuerdo con su forma fascista de gobernar, en cuestión de seguridad, solo ellos saben quienes delinquen y cuáles son las bandas organizadas de delincuentes y carteles que operan en Querétaro.
Así es como Querétaro, sufre del acoso, intimidación y nepotismo de una tripleta de funcionarios que gobiernan con autoritarismo a nuestro estado, aunque ya solo les faltan tres años a los queretanos para dejar de vivir esta grave pesadilla.
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