Las tejas de asbesto pueden ser peligrosas. La razón principal por la que las tejas de asbesto deben reemplazarse por alternativas más seguras es que las fibras de asbesto que se utilizan para construir el material representan un peligro para la salud cuando se inhalan y cuando entran en contacto con la piel. Aunque la mayoría de los productos de amianto no son realmente peligrosos per se, pueden serlo cuando las fibras se transportan por el aire. Aquí hay algunos datos que pueden resultarle útiles al identificar las tejas de asbesto.
Determine la edad del edificio
El amianto se utilizó desde principios de los años 20 hasta finales de los 80. Cuando un edificio es bastante antiguo, es muy probable que tenga materiales de construcción de amianto. Dado que los materiales de construcción de amianto no se pueden detectar fácilmente a simple vista, la mejor pista es averiguar cuándo se construyó realmente el techo. El asbesto no se reconoció plenamente como un peligro para la salud hasta finales de los años 80, cuando ciertos cánceres estaban relacionados con su exposición. Por lo tanto, los edificios antiguos tienen una gran posibilidad de tener este material peligroso. Las áreas habituales que utilizan materiales de construcción de asbesto incluyen aquellas que necesitan protección contra incendios. Debido a sus cualidades ignífugas, se ha utilizado alrededor de chimeneas e incluso paredes y techos exteriores.
¿De qué color es el asbesto?
El asbesto es en realidad de color blanquecino, grisáceo o azul blanquecino. Sin embargo, cuando se mezcla con otros materiales, puede ser imposible saber si se ha agregado amianto o no. Generalmente, las baldosas que contienen asbesto tienen un color gris, blanco o blanco azulado.
Proporcionar muestras para verificación de laboratorio
La única forma de saber con seguridad si las tejas contienen asbesto o no es hacer que una muestra sea revisada por un profesional bajo un microscopio que utiliza luz polarizada. Al tomar una muestra, tenga mucho cuidado porque el polvo de amianto puede ingresar a los pulmones y causar cáncer. Por tanto, cuando decida obtener una muestra, hágalo con ciertas precauciones.
En primer lugar, use guantes de goma y un respirador con filtro HEPA. Hay muchos kits de prueba de amianto disponible en el mercado. Puede utilizarlos siguiendo las instrucciones dadas. Sin embargo, si no tiene este kit, use una sierra para cortar una muestra. Para que los azulejos sean seguros para cortar, rocíelos con agua jabonosa. El agua hará que las fibras permanezcan intactas incluso cuando se corte la baldosa. Encuentre un área poco visible en el techo y marque una pulgada cuadrada de teja. Corta la baldosa con cuidado y colócala en un recipiente de plástico. Lleve la muestra a un laboratorio de pruebas de asbesto. El costo de probar una muestra pequeña es razonable. Si la loseta tiene menos del 1 por ciento de amianto, los resultados son negativos. Solo para asegurarse, tome dos o tres muestras para comparar.
Eliminación de tejas de asbesto
Cuando reemplace las baldosas con opciones más seguras, no lo haga sin cuidado. Asegúrese de evitar que las fibras se transporten por el aire. Es mejor dejar la tarea a profesionales capacitados que puedan manejar la situación de manera segura. A menos que tenga las habilidades necesarias, solicite un servicio profesional.